Publicado: abril 23, 2025, 2:45 pm
La fuente de la noticia es https://www.abc.es/internacional/opositor-ferrer-sitiado-amenazado-carcel-alimentar-cientos-20250423211411-nt.html
Hasta casi 1.300 personas vulnerables ha alimentado en un solo dÃa el opositor y expreso polÃtico José Daniel Ferrer GarcÃa en su provincia, Santiago de Cuba. Desde que el lÃder de la UNPACU (Unión Patriótica de Cuba) fuera excarcelado en enero, … ha implementado un proyecto humanitario mediante el cual distribuyen alimentos a los más necesitados: ancianos, enfermos mentales, alcohólicos, vagabundos y madres de varios hijos.
Aunque esta no constituye una acción ilegal, su vivienda permanece cercada por la policÃa polÃtica; los colaboradores y activistas que lo apoyan -comprando o elaborando alimentos- son detenidos, multados e intimidados; incluso, quienes le venden suministros, son multados, les confiscan sus productos y los amenazan con cerrarles sus negocios.
Ferrer GarcÃa relató a ABC que a una de las colaboradoras (persona que ayuda en la elaboración de los alimentos a cambio de comida y alguna remuneración), la Seguridad del Estado la detuvo y la amenazaron con encerrarla en un calabozo con alrededor de una treintena de hombres detenidos por delitos comunes en donde podrÃan violarla. «Te van a hacer de todo», le aseguró el militar. Para evitar eso, le exigieron que grabara un vÃdeo en donde dijo que se comprometÃa a no volver a la casa del opositor.
Infiltrados de la policÃa polÃtica
También «nos han robado los utensilios de cocina para evitar la elaboración de los alimentos», relató. Además, la policÃa polÃtica ha infiltrado a personas en su casa para que le contaminen la comida, creen peleas, les echen chinches o le tupan el baño.
Otra de las dificultades es la compra de los alimentos. Debido al cerco policial (varias patrullas y oficiales vestidos de civil), es muy complejo pasar los alimentos. «A veces tenemos que salir a comprarlos mi esposa o yo porque, hasta el momento, hemos sido los únicos que no hemos resultado detenidos y/o robados por la policÃa polÃtica», explica el activista.
«Hay que montar todo un operativo, como si estuvieses en medio de un conflicto militar, para poder alimentar a personas que pasan hambre, desnutridas, enfermas, ancianos, postrados, alcohólicos que viven en la calle y pésimamente alimentados, niños que llegan a la casa de la escuela con hambre y no tienen comida, y se fueron para la escuela sin ni siquiera desayunar porque ni pan han tenido en el dÃa», añadió.

La doctora Ortega atiende a una niña en presencia de su madre
No es esta la primera vez que José Daniel Ferrer implementa un proyecto de este tipo. Incluso, antes de ser encarcelado, en julio de 2021, lo hacÃa y enfrentó consecuencias similares que lo llevaron a desarrollar una huelga de hambre de 21 dÃas en la que participaron varios activistas de su organización. No obstante, asegura, en esta ocasión el acoso ha sido peor.
Los alimentos logran adquirirlos gracias a las donaciones de cubanos exiliados y algunos extranjeros que se identifican con la causa. Los elaboran con grandes cacerolas y fogones rústicos que conforman a base de leña o carbón, los únicos combustibles disponibles.
GuarderÃa infantil
«También tenemos una guarderÃa infantil para 17 niños; son los niños de las colaboradoras que tenemos aquÃ, que no tenÃan dónde cuidarlos, y se los han sacado del cÃrculo infantil para que dejaran de venir a colaborar, y entonces tuvimos que preparar condiciones. Ahà les garantizamos la leche, que no tomaban hace mucho tiempo, el desayuno, la merienda y el almuerzo», explicó.
Las raciones se distribuyen en el portal de su casa; la mayorÃa llevan sus vasijas. «Generalmente, cada persona que viene se lleva un promedio de tres comidas; uno se lleva dos, una ración para él o ella, y algún postrado enfermo que tiene la casa, algún anciano de muy avanzada edad, o algún hijo que esté en la escuela», indicó.
Esas personas también son amenazadas por la policÃa polÃtica: los han detenido y les han quitado la comida, los amenazan con encerrarlos en hospitales psiquiátricos y a las madres con quitarles a sus hijos.
Mientras reparten los alimentos, su esposa, la doctora Nelva Ortega, atiende a pacientes enfermos que acuden en su ayuda o en busca de medicamentos que no encuentran en las farmacias estatales; medicamentos que reciben mediante donaciones internacionales.
Un deber cristiano
Según Ferrer, el hostigamiento de la Seguridad del Estado a una labor humanitaria como la suya responde a dos motivos: primero, porque sostienen que él usa ese proyecto con fines polÃticos. «Pero, imagÃnate, ¿qué le podrÃa yo pedir a un anciano enfermo, una madre de cinco hijos, a un alcohólico o a un enfermo mental? Eso no tiene fundamento alguno», sostiene.
Segundo, «porque este trabajo expone el estado de abandono que tienen estas personas, lo vulnerables que son, expone las carencias sociales, la miseria, y eso, a su vez, desmonta el discurso oficial del régimen, de que en Cuba no existen diferencias sociales ni miseria».
Ferrer GarcÃa fue excarcelado bajo «libertad condicional», por lo que permanece la amenaza de volver a prisión. Sin embargo, el activista se niega a dejar de cumplir con su deber como cubano y como cristiano.
«Lo hemos venido haciendo y lo vamos a seguir haciendo, cueste lo que cueste, incluso nuevamente a la prisión y hasta la muerte»
José Daniel Ferrer
Activista y expreso polÃtico
«De la misma manera que llevo más de 30 años dando mi humilde contribución a la lucha por la libertad, por la democracia y el respeto a los derechos humanos, siempre he dicho que no ayudar al necesitado no es de persona de bien, no es de buen cristiano, no es de un ser humano que -en verdad- diga que se preocupa por el bienestar de los demás. Si decimos que luchamos por la libertad y el bienestar de los cubanos, hay que demostrarlo con hechos», afirmó.
Respecto a la posibilidad de ser nuevamente encarcelado, respondió: «Es una cuestión de principios, de deber. Lo hemos venido haciendo y lo vamos a seguir haciendo, cueste lo que cueste, incluso nuevamente a la prisión y hasta la muerte».