Publicado: febrero 15, 2025, 11:44 am
La fuente de la noticia es https://www.abc.es/internacional/escuadron-secreto-elon-musk-encargado-analizar-infraestructura-20250215183624-nt.html
Elon Musk está sembrando el caos con su Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE). La idea, que ha entrado como una bola de demolición en muchos edificios federales, es recortar en gasto público y remodelar las agencias gubernamentales. Hasta ahora, y no sin obstáculos legales de por medio, ha despedido o suspendido a empleados públicos, accedido a datos privados de millones de estadounidenses o pedido acceso a sistemas sensibles que afectan a miles de empresas. Una labor que según revelaba ‘Wired’ ha dejado en manos de una serie de jóvenes ingenieros inexpertos que van de los 19 a los 24 años, y cuyos perfiles son de lo más heterodoxos.
Los muskovitas
Capitaneados por el fundador de Tesla se han presentado en el Departamento de Asuntos de Veteranos o el Departamento del Tesoro pidiendo acceso a sus datos. El temor para muchos es que cuentan con carta blanca y son reacios a la transparencia o a la rendición de cuentas por sus acciones. Ahora, se conocen seis nombres que han salido a la luz gracias a las indagaciones de la prensa estadounidense.
Apodados los seis empollones o muskovitas, el más joven acabó el instituto en 2024. Uno de ellos es un trabajador voluntario. Y otros dos de los jóvenes parecen tener conexiones con el polémico Peter Thiel, fundador de PayPal y gurú de Silicon Valley que en más de una ocasión ha expresado su rechazo a la democracia. Carecen de experiencia previa en trabajo gubernamental de alto nivel y son representantes de la Oficina de Gestión de Personal (OPM), la Administración de Servicios Generales (GSA) y DOGE.
Un adolescente nombrado asesor principal
De los seis es Edward Coristine, un adolescente de 19 años, que responde al apodo de ‘Big Balls’ (huevos grandes), el que más atención mediática ha atraído. Un joven con un supuesto pasado de hacker a quien han colocado como asesor principal. Se graduó recientemente, y el verano pasado estuvo tres meses en la empresa Neuralink, la compañía neurotecnológica de Musk.
Coristine, según las investigaciones, es un talento precoz que ha creado cinco compañías diferentes en los últimos cuatro años, registradas en distintos puntos del globo. A los 16 años fundó Tesla.Sexy LLC, una empresa que controla docenas de dominios web, dos de ellos registrados en Rusia. Uno de sus dominios ofrece un bot de IA para servidores de Discord dirigido expresamente al mercado ruso. Un detalle que ha generado alarma entre los expertos teniendo en cuenta que en su trabajo actual tiene la potestad de manejar información altamente sensible.
También estuvo involucrado en 2022 con Path Network, una empresa de monitorización de redes que contrata a hackers reformados. A ello se une que otro de sus antiguos dominios- faster.pw.- mostraba contenido en chino que, tal como detalla la revista ‘Wired’, ayudaba a proporcionar «múltiples redes transfronterizas encriptadas». Ahora, con vía libre y según distitnos testimonios ha llegado a irrumpir en llamadas grupales de trabajadores del Gobierno para exigir información federal sin aceptar identificarse.
De descifrador de los papiros de Herculano al trabajo de sus sueños
Y entre los cinco ingenieros restantes que sacaba a relucir la revista ‘Wired’ están: Akash Bobba, Luke Farritor, Gautier Cole Killian, Gavin Kliger y Ethan Shaotran. La agencia AP informaba que este grupo ha intentado acceder a material clasificado y del USAID (Agencia de EE.UU. para el Desarrollo Internacional). Algo que para los expertos no tiene precedentes.
Y los altos funcionarios que han intentado pararles los pies han visto cómo recibían al día siguiente una suspensión remunerada. Cabe destacar que los esfuerzos de la prensa han ido a contrarreloj porque a su vez estos cinco individuos han ido borrando todo rastro de sus antecedentes en la red.
Farritor, de 21 años, abandonó sus estudios en la Universidad de Nebraska-Lincoln. Fue becario en la empresa espacial SpaceX, y en la actualidad está vinculado a Thiel. Además, desarrolló un algoritmo de aprendizaje automático que detectó letras griegas en varias líneas del papiro de Herculano. Un enigma del conocimiento de la Antigua Roma que fascina a Elon Musk y por el que ha apostado millones de dólares.
Bobba estudió programa de Gestión, Iniciativa Empresarial y Tecnología en la prestigiosa Universidad de Berkeley. En LinkedIn, antes de que lo borrara, aparecía que había sido becario de ingeniería de inversiones en el fondo de cobertura Bridgewater Associates y también en Meta (antigua Facebook) y Palantir. Además, llegó a participar en un podcast hablando de cómo conseguir el trabajo de tus sueños.
Kliger estuvo cursando estudios en la Universidad de Berkeley hasta 2020. En su LinkedIn, dice que trabajó para la empresa de IA Databricks. Y tiene varios posts titulados: «El curioso caso de Matt Gaetz: Cómo el Estado Profundo destruye a sus enemigos», y «Pete Hegseth como secretario de Defensa: El guerrero al que teme Washington».
Killian figura en DOGE como voluntario. Y antes de que eliminara su currículum de la web estuvo matriculado en Universidad McGill hasta 2021. La prensa estadounidense consiguió salvar parte de la información que aparecía en su sitio web personal que indicaba que fue ingeniero en Jump Trading, una compañía dedicada a operaciones financieras algorítmicas.
Por último, Shaotran estaba estudiando informática en Harvard. Fue el fundador de la startup Energize AI respaldada por OpenAI de la que recibió una subvención de 100.000 dólares. También está en su historial haber quedado finalista en un hackathon organizado por xAI, la empresa de inteligencia artificial de Musk.
En suma, estamos ante seis perfiles cuanto menos llamativos de talento joven que están revisando datos de principal importancia para la primera potencia del mundo. Pueden ocupar una sala entera del séptimo piso de un edificio federal sin dar más explicaciones que decir que vienen de parte de Elon Musk. Y frente a ellos solo se encuentran al funcionario de turno que teme las represalias del nuevo escudero de Trump.