Registro  /  Login

Portal de Negocios en Colombia


EE.UU. se une a Rusia y China para no llamar «agresor» a Putin en el Consejo de Seguridad de la ONU

El acercamiento de Donald Trump a Vladimir Putin ha procurado una victoria para EE.UU. en el Consejo de Seguridad de la ONU, el órgano de poder de la organización internacional.EE.UU. votó junta a sus dos grandes potencias rivales con derecho a … veto -Rusia y China- una resolución con un texto muy breve sobre la paz entre Ucrania y Rusia, en unos términos en los que no están de acuerdo ni el país invadido ni los socios occidentales de EE.UU. Es decir, sin llamar «agresor» a Rusia, ni exigir el respeto a la «soberanía y la integridad territorial» de Ucrania y limitándose a pedir una paz «duradera», sin que sea «justa y comprensiva».
Era el mismo texto que EE.UU. introdujo horas antes en la Asamblea General, donde participan todos los países y donde no hay derecho de veto. Y donde las resoluciones, al contrario que en el Consejo de Seguridad, no son vinculantes. Allí el texto fue enmendado en la dirección que buscaban Ucrania y el resto de aliados occidentales.

Pero en el Consejo de Seguridad el veto de Rusia impidió que esas enmiendas salieran adelante. Así, el texto que salió a votación fue el de la redacción original. Una resolución, según la representante de EE.UU., la embajadora interina Dorothy Shea, «elegante en su simplicidad», que es solo «un primer paso simbólico hacia la paz».
Tanto Reino Unido como Francia, las dos potencias europeas con derecho a veto, podrían haber descarrilado la adopción de esta resolución. Pero, en un momento, en el que buscan contener las tensiones con el Gobierno de Donald Trump -se votaba el mismo día en el que Emmanuel Macron, presidente de Francia, visitaba la Casa Blanca y pocos días antes de que lo haga el primer ministro británico, Keir Starmer- ambos países optaron por una estrategia de oposición leve a EE.UU. Primero, intentaron sin éxito retrasar la reunión del Consejo hasta el martes, sin éxito. Después, trataron de introducir enmiendas (las que Rusia tumbó). Finalmente, como los otros tres países europeos en el Consejo -Dinamarca, Eslovenia y Grecia- optaron por la abstención.
«No podemos votar a favor de esta resolución, pero compartimos la ambición de encontrar la paz», dijo la embajadora de Reino Unido, Barbara Woodward, para defender su voto.
Así, Trump consiguió una importante victoria diplomática: la aprobación de la primera resolución en el Consejo de Seguridad sobre la guerra en Ucrania, sin ningún voto en contra: diez a favor y cinco abstenciones. Se hace, eso sí, fuera de los términos que hasta ahora habían defendido EE.UU. y sus aliados sobre Ucrania, la agresión de Rusia y el camino para acabar con la guerra.
Quien no celebró la resolución fue Ucrania. «Cualquier paz que suponga premiar al agresor incrementa el riesgo de que cualquier país sufra una agresión similar», defendió la viceministra de Exteriores de Ucrania, Betsa Mariana, en los pasillos de la sede de la ONU en Nueva York antes de la reunión del Consejo. «Eso crea un precedente peligro de futuro, deteriorando los principios de la ley internacional y de la soberanía de todas las naciones».

Publicado: febrero 24, 2025, 5:44 pm

La fuente de la noticia es https://www.abc.es/internacional/consejo-seguridad-onu-aprueba-resolucion-eeuu-sobre-20250224231335-nt.html

El acercamiento de Donald Trump a Vladimir Putin ha procurado una victoria para EE.UU. en el Consejo de Seguridad de la ONU, el órgano de poder de la organización internacional.

EE.UU. votó junta a sus dos grandes potencias rivales con derecho a veto -Rusia y China- una resolución con un texto muy breve sobre la paz entre Ucrania y Rusia, en unos términos en los que no están de acuerdo ni el país invadido ni los socios occidentales de EE.UU. Es decir, sin llamar «agresor» a Rusia, ni exigir el respeto a la «soberanía y la integridad territorial» de Ucrania y limitándose a pedir una paz «duradera», sin que sea «justa y comprensiva».

Era el mismo texto que EE.UU. introdujo horas antes en la Asamblea General, donde participan todos los países y donde no hay derecho de veto. Y donde las resoluciones, al contrario que en el Consejo de Seguridad, no son vinculantes. Allí el texto fue enmendado en la dirección que buscaban Ucrania y el resto de aliados occidentales.

Pero en el Consejo de Seguridad el veto de Rusia impidió que esas enmiendas salieran adelante. Así, el texto que salió a votación fue el de la redacción original. Una resolución, según la representante de EE.UU., la embajadora interina Dorothy Shea, «elegante en su simplicidad», que es solo «un primer paso simbólico hacia la paz».

Tanto Reino Unido como Francia, las dos potencias europeas con derecho a veto, podrían haber descarrilado la adopción de esta resolución. Pero, en un momento, en el que buscan contener las tensiones con el Gobierno de Donald Trump -se votaba el mismo día en el que Emmanuel Macron, presidente de Francia, visitaba la Casa Blanca y pocos días antes de que lo haga el primer ministro británico, Keir Starmer– ambos países optaron por una estrategia de oposición leve a EE.UU. Primero, intentaron sin éxito retrasar la reunión del Consejo hasta el martes, sin éxito. Después, trataron de introducir enmiendas (las que Rusia tumbó). Finalmente, como los otros tres países europeos en el Consejo -Dinamarca, Eslovenia y Grecia- optaron por la abstención.

«No podemos votar a favor de esta resolución, pero compartimos la ambición de encontrar la paz», dijo la embajadora de Reino Unido, Barbara Woodward, para defender su voto.

Así, Trump consiguió una importante victoria diplomática: la aprobación de la primera resolución en el Consejo de Seguridad sobre la guerra en Ucrania, sin ningún voto en contra: diez a favor y cinco abstenciones. Se hace, eso sí, fuera de los términos que hasta ahora habían defendido EE.UU. y sus aliados sobre Ucrania, la agresión de Rusia y el camino para acabar con la guerra.

Quien no celebró la resolución fue Ucrania. «Cualquier paz que suponga premiar al agresor incrementa el riesgo de que cualquier país sufra una agresión similar», defendió la viceministra de Exteriores de Ucrania, Betsa Mariana, en los pasillos de la sede de la ONU en Nueva York antes de la reunión del Consejo. «Eso crea un precedente peligro de futuro, deteriorando los principios de la ley internacional y de la soberanía de todas las naciones».

Artículos Relacionados