EE.UU. acuerda con Rusia y Ucrania garantizar la navegación segura en el mar Negro

La Casa Blanca anunció este martes el resultado de dos rondas paralelas de negociaciones técnicas mantenidas en Riad entre delegaciones de Rusia y Ucrania con representantes de Estados Unidos, en cumplimiento de los compromisos asumidos por Donald Trump con Vladímir Putin y Volodímir … Zelenski por separado.
Ambas reuniones se celebraron entre el 23 y el 25 de marzo en Arabia Saudí, con la mediación del príncipe heredero Mohamed bin Salmán. Trump ha dado indicaciones de que podría llegar a verse con Putin en ese país. Al presidente de Ucrania lo echó sin miramientos de la Casa Blanca a finales de febrero, tras una discusión por la resistencia de este a un alto el fuego que congele las líneas del frente.
Aunque no hay aún un acuerdo directo entre Rusia y Ucrania, ambos países han pactado por separado con Estados Unidos medidas similares: garantizar la navegación segura en el mar Negro, evitar el uso de buques comerciales con fines militares y prohibir ataques contra instalaciones energéticas en Rusia y Ucrania.

Washington se compromete, además, a seguir facilitando negociaciones de paz y reiteró la «imperativa» orden de Trump de que cese la violencia en ambos bandos, aunque al presidente estadounidense se le resiste un acuerdo que en campaña vendió como fácil de lograr.
En el caso ruso, EE.UU. apoyará el regreso de Moscú al mercado internacional de fertilizantes y productos agrícolas, incluyendo rebajas en los seguros marítimos y mayor acceso a puertos y sistemas de pago.
Con Ucrania, Washington impulsará intercambios de prisioneros, la liberación de civiles detenidos y la devolución de menores ucranianos deportados por la fuerza. Las dos partes aceptan que países terceros puedan apoyar la implementación de los acuerdos alcanzados.
Los entendimientos alcanzados en Riad suponen, de facto, un alivio parcial a las sanciones impuestas a Rusia desde el inicio de la invasión de Ucrania en 2022. Al comprometerse a facilitar el regreso de Moscú a parte del mercado global y desbloquear su acceso a sistemas de pago, EE.UU. da un paso que puede interpretarse como una concesión relevante a las exigencias rusas, en un intento por contener la escalada militar en el mar Negro y proteger la seguridad energética europea. Washington evita presentar estas medidas como un levantamiento de sanciones, pero los efectos prácticos van en esa dirección.
En ningún momento se aborda en estos comunicados la situación territorial creada por la anexión rusa de Crimea en 2014 ni de las regiones de Donetsk, Lugansk, Zaporiyia y Jersón en 2022, todas declaradas por Moscú como parte de su territorio.
Tampoco se contempla un alto el fuego amplio o una retirada militar, y la iniciativa se limita a evitar ataques contra infraestructuras energéticas y embarcaciones comerciales. La ausencia de cualquier compromiso ruso para devolver territorios ocupados, así como la falta de un mecanismo internacional de verificación, pone en duda el alcance real del proceso iniciado en Riad en esta fase, tras más de un mes de contactos.