Cada vez vivimos más. En el transcurso del siglo XX, la esperanza de vida en los países de altos ingresos ha aumentado en aproximadamente 30 años. Esto significa que hoy en día vivimos lo suficiente para envejecer y, por ende, para ver como nuestro cuerpo -nuestra máquina- se va deteriorando con el uso. Sin duda, una de las partes más delicadas y vulnerables al paso del tiempo son los ojos.