El trabajo desde casa se ha convertido en la modalidad habitual para muchas empresas y esto ha representado un gran desafío para la estructura organizacional, realizando muchos procesos de gestión de talento y evaluación de desempeño a sus colaboradores de manera diferente.
De acuerdo con datos del Ministerio de las TIC, con la llegada del covid-19, hubo un incremento del 71% en el número de teletrabajadores, comparado con 2018. Adicionalmente, para 2020, cuatro de cada 10 empresas implementaron una modalidad de trabajo remoto y dos de cada 10 lo acogieron de manera formal.
Ahora, en medio de una reactivación donde la virtualidad y la presencialidad convivirán de manera simultánea, se abre la necesidad de evaluar el desempeño y garantizar un entorno beneficioso tanto para los colaboradores como para las empresas.
De acuerdo con Inés Hochstadter, Country Manager de Despegar Colombia, Perú y Ecuador, es crucial obtener una retroalimentación constante por parte de los equipos de trabajo, con el objetivo de reforzar los puntos que se consideran vitales para el desempeño. “El principal activo es el talento. Al realizar una evaluación de desempeño podemos, desde descubrir áreas de oportunidad hasta conocer aspectos del clima organizacional, cultura, comunicación interna, etc.”, asegura.
Estas son cuatro recomendaciones que hace y que se aplican al interior de la Compañía para realizar evaluaciones de desempeño en este nuevo contexto:
- Crear espacios para el aprendizaje:
La pandemia ha representado nuevos retos en la estructura y en la comunicación de las compañías, por lo tanto, en Despegar se preocupan por crear un entorno de aprendizaje para el desarrollo profesional a través de estructuras organizacionales que permitan enfocarse en las habilidades de los colaboradores, donde la más importante es la capacidad de aprender.
- Plantear nuevos objetivos:
En la Compañía cuentan con un proceso de gestión del desempeño cuyo propósito es reforzar la cultura de excelencia. De esta manera, aseguran la meritocracia e impulsan el feedback continuo. Este proceso toma en consideración las competencias que son la guía de acción y que incluyen trabajo en equipo, foco en el cliente, innovación y creatividad, excelencia e integridad profesional.
También impulsan desde el Talent Development herramientas para que cada colaborador reconozca sus fortalezas, oportunidades y experiencias para crecer, y así pueda involucrarse en proyectos desafiantes, construir relaciones de confianza que lo ayuden a crecer y participar en instancias de capacitación.
- Feedback positivo:
La evaluación de desempeño no tiene por qué ser un proceso que se perciba como algo negativo, sino todo lo contrario, debe considerarse como una oportunidad para revisar cómo se encuentran cada uno de los colaboradores y así buscar de forma conjunta la mejor manera de desarrollar su máximo potencial y reforzar la manera en la que realizan su trabajo.
- La motivación como parte del proceso:
El rol del líder es fundamental en estos tiempos. Hay un acompañamiento sostenido, tanto desde RRHH como del resto de las áreas. Los líderes se enfocan en estar cerca de sus equipos, disponibles, acompañando y contemplando las particularidades y situaciones de cada persona, es una práctica que se trabaja en todos los países donde opera la empresa de viajes.
Durante la pandemia se aumentó la frecuencia de las reuniones donde se busca tener conversaciones cercanas, conocer sus preocupaciones y dudas, intercambiar ideas y compartir las prioridades estratégicas del negocio. La comunicación, una vez más, es la columna vertebral de todo proceso.