Publicado: agosto 9, 2017, 4:14 pm
La consultora realizó un estudio donde se evidenció que el 30% de los colaboradores de las diferentes compañías son más activos que el resto de sus compañeros, los cuales se adaptan con mayor facilidad a cualquier cambio y tienen menos riesgos de tener accidentes laborales, factores que impactan positivamente la productividad de las empresas en un 80% y que ayudan a contribuir en un buen clima organizacional y laboral.
En la actualidad es tendencia los “GeFes” gestores de felicidad que arrasan en las empresas por su convicción de motivar a los empleados, todo lo contrario a los jefes habituales que se concentran simplemente en asignar una tarea y/o trabajo y su preocupación no vas a allá de que el empleado lo entregue en la fecha y tiempo asignado.
Un «GeFe»se preocupa y encamina a los trabajadores para lograr el objetivo, buscando que ellos se sientan acompañados y motivados para lograr que se fidelicen con la empresa y que esto se vea reflejado en mejores resultados para la compañía.
Felipe Delgado, Executive Manager de Michael Page expresó “A través de este modelo de jefatura se impacta de mejor manera la organización obteniendo como resultado personas mucho más motivadas y optimistas y un entorno más abierto para desarrollar el talento. Así mismo, este tipo de jefaturas desarrolla una mayor adaptación de la persona al equipo, entorno de creatividad, lealtad y resolución de problemas” Ya que los empleados hoy en día prefieren un mejor clima laboral a un mejor sueldo.
También es bueno para los empleados que se sientan en la total libertad de expresar y proponer ideas nuevas, que existan en la empresa canales de comunicación abiertos. Delgado también afirmó que “Este modelo de gestión ya es un realidad en los países europeos donde los colaboradores y líderes están involucrados de tal manera que los colaboradores son capaces de dar la milla extra por su empresa en pos de la obtención de los objetivos porque se sienten cómodos en su entorno, son más propensos a compartir sus ideas y se sienten identificados con la organización por lo que aumentan su compromiso con ella y desarrollan mejor su talento. Un colaborador feliz aumenta su indicador de permanencia en la empresa, reduciendo la tasa de rotación de la misma, lo que se transforma en un indicador de riesgo menos para la compañía”.
De esta manera se evidenció que es mucho mejor invertir tiempo en tener empleados felices y no empleados malhumorados e inconformes con el clima laboral, ya que esto afecta negativamente la productividad de la empresa
