Publicado: octubre 9, 2025, 10:45 am
La fuente de la noticia es https://www.abc.es/internacional/acuerdo-incognitas-ambiguedades-20251009161121-nt.html
Diez días después del anuncio conjunto de Trump y Netanyahu sobre un nuevo plan de 20 puntos para poner fin al conflicto en Gaza, Hamás e Israel han pactado esta mañana un acuerdo de alto el fuego y canje de rehenes. No es más … que la primera fase de un pacto que aún está repleto de incógnitas y ambigüedades, sin embargo, representa un gran logro que aliviará, si no hay contratiempos, sufrimientos a uno y otro lado del conflicto.
El acuerdo llega tras días de intensa negociación en Sharm el-Sheij entre Israel, Estados Unidos, y las delegaciones de Qatar, Egipto y Turquía que actúan como mediadores de Hamás y prevé, el intercambio de 48 rehenes israelíes, 20 de ellos con vida, por 2.000 presos palestinos, la retirada técnica del ejército israelí y la entrada de la ayuda humanitaria en una Gaza bloqueada por Israel desde el pasado marzo. Un bloqueo que es responsable directo la hambruna deliberada.
El acuerdo calificado por Netanyahu como un «gran éxito diplomático y moral para Israel» debía ser ratificado por su gabinete. Algunos de los miembros del gobierno manifestaron su oposición: el ministro de finanzas Bezalel Smotrich mantiene que «Hamás debe ser aniquilado después de la entrega de los rehenes».
Esta es precisamente la mayor preocupación de los palestinos. El acuerdo no recoge ningún sistema de garantías que asegure que Israel no romperá la tregua una vez que los rehenes estén de vuelta. Y hasta el momento Israel ha roto unilateralmente todos los altos el fuego sin consecuencias. Por otra parte, la ambigüedad sobre los tiempos y extensión de la retirada israelí de Gaza alimentan aún más las desconfianzas. Desde el inicio de la ofensiva Netanyahu ha manifestado que la retirada de Gaza nunca sería total y que se mantendría una presencia militar en un perímetro indeterminado.
El contexto internacional ha sido decisivo para alcanzar el acuerdo. El aislamiento de Israel crece a medida que las imágenes de destrucción y hambre en Gaza provocan una indignación global. Las manifestaciones multitudinarias en las principales ciudades europeas han sido decisivas en el giro político de muchos dirigentes occidentales. Estados Unidos se cuestiona la alianza con un Israel incontrolado. El ataque que Tel Aviv contra la delegación de Hamás en Qatar, supuso un punto de inflexión, tras tomar conciencia del costo político de un apoyo incondicional a Israel.
El momento también refleja las debilidades de Hamás, con su liderazgo diezmado y sin el respaldo del Eje de Resistencia. Hamás se enfrenta a su capitulación, el acuerdo de Trump exige la entrega de armas y el compromiso de no participar en el futuro de Palestina, pero sus opciones se agotan.
La gran incógnita es el día después, cuando Israel recupere a todos los rehenes, y Hamás haya perdido su última baza negociadora. Estados Unidos y Qatar aseguran que Israel respetará la tregua, pero en ausencia de un sistema de garantías, estas declaraciones no son más que promesas vacías.
Pese a todas las dificultades e imperfecciones este acuerdo representa un respiro frágil para Gaza.