Publicado: octubre 3, 2025, 4:45 pm
La fuente de la noticia es https://www.abc.es/internacional/hamas-puntos-plan-trump-quiere-negociar-20251003232430-nt.html
Hamás emitió un comunicado en el que, tras agradecer a Trump su implicación, anunciaron su «aprobación para liberar a todos los cautivos israelíes, tanto vivos como restos mortales, dentro del marco del intercambio planteado en la propuesta del presidente Trump, siempre que se garanticen … las condiciones necesarias sobre el terreno para llevar a cabo dicho intercambio».
Hamás acepta este punto clave del plan de paz y toma la propuesta de Estados Unidos como una hoja de ruta sobre la que empezar «negociaciones inmediatas, a través de los mediadores, para discutir los detalles del proceso». Los islamistas devuelven la pelota al tejado de la Casa Blanca para intentar concretar la lista de los 20 puntos. Los islamistas no aceptan la rendición que les exige Israel.
La respuesta no es clara en un tema clave como el del desarme, que ni siquiera se menciona. Trump indicó que quería una respuesta clara, ya sea un «sí» o un «no», y no un vago «sí, pero…», que es lo que ha ofrecido Hamás. De momento, lo primero que hizo Trump fue compartir en su perfil de Truth Social el comunicado de Hamás.
Los islamistas alaban al presidente estadounidense, una actitud que los dirigentes del mundo han comprobado que es necesaria antes de dirigirse a él, y piensan que su propuesta está encaminada a «poner fin a la guerra en Gaza, lograr un intercambio de prisioneros, garantizar la entrada inmediata de ayuda humanitaria, rechazar la ocupación de la Franja de Gaza y evitar el desplazamiento de nuestro pueblo».
Otro de los puntos clave del comunicado es el control futuro de la Franja. El nombre de Tony Blair, figura destacada por Trump para su «consejo de paz», no aparece por ninguna parte y apuestan por «transferir la administración a una autoridad palestina compuesta por independientes (tecnócratas), basada en el consenso nacional y con el respaldo del mundo árabe e islámico». Hamás no quiere una administración internacional para Gaza.
Intercambio de rehenes
Una vez hecha pública la respuesta, que llegó después de cinco días de intensas negociaciones entre las facciones palestinas, llegaron las primeras aclaraciones por parte del movimiento islamista. Mousa Abu Marzouk, alto cargo del grupo, aclaró en Al Jazeera que «entregar a los rehenes y los cuerpos en un plazo de 72 horas es algo teórico e irreal dadas las circunstancias actuales». Otro alto cargo, Osama Hamdam, habló en Al Araby y adelantó que «no aceptamos que ningún partido no palestino gestione los asuntos de Gaza». Los altos cargos en el exilio volvieron a las pantallas de televisión tras el intento de asesinato por parte de Israel en Doha. Estas declaraciones refuerzan la lectura de la respuesta positiva de Hamás como un primer paso para negociar el acuerdo de Trump, en el que ellos no habían tenido parte y que Benjamín Netanyahu adaptó a sus necesidades tras modificar la versión consensuada por los países árabes e islámicos en Nueva York.
Desde que regresó de Estados Unidos, el primer ministro israelí no ha tenido reuniones de gobierno debido a las fiestas judías, pero es consciente de que los ministros ultranacionalistas no son partidarios de este plan. El sector más radical de Israel rechaza el texto porque lo ven como una derrota ya que implicaría conceder amnistía a miembros de Hamás, no se anexionaría territorio y los palestinos no tendrían que ser desplazados, ni expulsados por la fuerza de su tierra natal.
Presión militar y diplomática
Hamás ha tenido una gran presión diplomática en los últimos días ya que Turquía y Qatar, sus dos grandes aliados, apoyaron el acuerdo. A lo largo de la semana fuentes de la mediación indicaron a la cadena BBC que había discrepancias de criterio entre la cúpula del grupo dentro y fuera de la Franja. Estas fuentes señalaron que establecieron contacto con el nuevo jefe del ala militar, Izz al-Din al-Haddad, quien habría indicado que no está de acuerdo con el nuevo plan de alto el fuego. Teniendo en cuenta la redacción final de la repuesta ofrecida a Trump, esta especie de «sí… pero» ofrecido a Estados Unidos sirve para contentar a todas las partes dentro del movimiento.
El martes se produjo un encuentro en Doha entre los líderes islamistas y los enviados de Turquía, Catar y Egipto. Según el diario saudí Asharq Al Awsat, los mediadores aseguraron a Hamás que el plan presentado es susceptible de modificación en muchos de sus puntos y ahora, tras conocer la respuesta, habrá que comprobar la flexibilidad de la Casa Blanca y la capacidad que tienen los mediadores de convencer a Trump y Netanyahu de que hay que dar una nueva oportunidad al diálogo.
A la presión diplomática hay que sumar la militar porque Israel avanza sin freno en su invasión de Ciudad de Gaza. Quedan unos 200.000 civiles en una ciudad convertida en zona de combate y, a partir de ahora, todos serán considerados «terroristas, según el ministro de Defensa, Israel Katz.