Publicado: septiembre 30, 2025, 2:45 pm
La fuente de la noticia es https://www.abc.es/internacional/trump-lanza-cruzada-woke-ejercito-promete-gasto-20250930181429-nt.html
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, defendió este lunes el despliegue de las Fuerzas Armadas para restaurar el orden en ciudades del país, apelando a precedentes históricos de George Washington y Abraham Lincoln. Aseguró que esta medida ha convertido a Washington en «la … ciudad más segura» en apenas un mes, con una reducción del 28% en los delitos violentos respecto al año anterior y tres homicidios registrados frente a los 11 del mismo periodo de 2024.
Durante un discurso de 72 minutos en la base de Quantico, en Virginia, ante mandos militares, Trump subrayó la necesidad de priorizar la lucha contra las amenazas internas y contra los «cárteles terroristas» en el continente americano. Anunció además una inversión de más de mil millones de dólares en el ejército para 2026, con la meta de hacer a EE.UU. «tan fuerte que ninguna nación se atreva a desafiarnos».
El acto fue organizado por su secretario de Defensa, Pete Hegseth, quien convocó a los generales la semana pasada, generando rumores sobre movilizaciones militares y ceses masivos. Hegseth, veterano con servicio en Irak y Afganistán, centró su intervención en denunciar las políticas previas del Pentágono.
Rechazó el anterior lema de «la diversidad es nuestra fuerza», calificándolo de falacia, y arremetió contra iniciativas de diversidad, equidad e inclusión, políticas de género, apoyo a tropas transgénero, declaraciones LGTB, mandatos de vacunación contra el coronavirus y programas ambientales, entre ellos el uso de tanques eléctricos.
El secretario de Defensa defendió la transformación del Departamento de Defensa en un «Departamento de Guerra», con énfasis en el «carácter guerrero» y la preparación para enfrentar enemigos con «violencia, precisión y ferocidad». Sostuvo que las fuerzas armadas han sido debilitadas por políticas «progresistas» y por interpretaciones erróneas del concepto de liderazgo tóxico.
Anunció así la revisión de definiciones como «acoso sexual» y «novatadas», con el objetivo de devolver poder a los mandos y limitar expedientes disciplinarios rápidos. Invitó a abandonar sus cargos a quienes no compartan esa visión.
Aunque la denominación oficial sigue siendo Departamento de Defensa, Hegseth y Trump han cambiado simbólicamente el nombre a Departamento de Guerra, a la espera de que el Capitolio apruebe formalmente la transición.
Superioridad nuclear
Trump dedicó parte de su discurso a la OTAN. Atribuyó el aumento del gasto en defensa de los aliados a la presión ejercida por su Gobierno, aseguró que la invasión rusa de Ucrania «nunca habría ocurrido» de no ser por las «elecciones robadas» en 2020 —las que ganó Joe Biden— y calificó a Vladímir Putin de «tigre de papel». También presumió de la superioridad nuclear estadounidense, un tema al que se refirió como «la palabra n» que no se debe pronunciar, que según él son dos: «nuclear» y «negro», en lo que presentó como una broma sobre la corrección política.
El presidente celebró un repunte en el reclutamiento militar en los últimos ocho meses y reafirmó que las prioridades deben ser «aptitud, carácter y fuerza», no «proteger sentimientos». Criticó la criminalidad en ciudades gobernadas por demócratas, como Chicago y Portland, esta última descrita como «zona de guerra» que requiere intervención militar. Justificó respuestas firmes contra manifestantes: «Si escupen, golpeamos».
En paralelo, firmó una orden ejecutiva para crear una fuerza de reacción rápida de la Guardia Nacional contra «el enemigo interno» y reivindicó la recuperación del nombre Departamento de Guerra como una «reafirmación histórica» del espíritu militar del país.
El discurso, recibido con aplausos contenidos en un auditorio militar mayormente inexpresivo, incluyó ataques a Joe Biden, a quien acusó de debilidad y de firmar documentos con ‘autopen’, salvo el indulto a su hijo Hunter. Contrastó su liderazgo con el de su predecesor, afirmando que ahora EE.UU. es «respetado de nuevo» y no un país donde el presidente «cae por las escaleras todos los días».
El acto tuvo lugar en un contexto de tensiones internas, con protestas y debate sobre el papel de las Fuerzas Armadas en asuntos domésticos, mientras Trump busca consolidar su agenda de seguridad nacional en su segundo mandato.