Rodrigo Paz, el centrista nacido en Galicia e hijo de expresidente que ha dado la sorpresa en Bolivia - Colombia
Registro  /  Login

Portal de Negocios en Colombia


Rodrigo Paz, el centrista nacido en Galicia e hijo de expresidente que ha dado la sorpresa en Bolivia

La gran sorpresa de las elecciones en Bolivia tiene nombre y apellidos: Rodrigo Paz Pereira. Contra todo pronóstico, el senador de perfil moderado y candidato del Partido Demócrata Cristiano (PDC) terminó primero en los resultados preliminares y disputará la segunda vuelta con el … expresidente Jorge ‘Tuto’ Quiroga, en un escenario que pone fin a dos décadas de hegemonía del MAS, partido de gobierno del presidente Luis Arce y exfuerza de Evo Morales antes de ser expulsado.
Su propuesta, reducir el gasto del Estado, mano dura contra la corrupción y acuerdos legislativos, se ha leído como la opción de cambio y renovación que buscaba una parte del electorado.
Paz nació en Santiago de Compostela en 1967, durante el exilio de sus padres, perseguidos en gobiernos militares. Es hijo del expresidente Jaime Paz Zamora, creció entre España y Bolivia, una vida atravesada por la política desde la cuna. Ese dato conecta su historia personal con la de miles de familias que viven los vaivenes del país fuera de sus fronteras.

Es economista de formación y en su trayectoria ha sido concejal y luego presidente del Concejo Municipal de Tarija, alcalde de esa ciudad en 2015 y, desde 2020, senador por Tarija. Ese recorrido le ha permitido presentarse como gestor con oficio y conocimiento del Estado.
En campaña, Paz se definió como centrista y reformista, con un discurso de austeridad, recorte de gasto innecesario, eficiencia administrativa y «mano dura» frente a la corrupción.
Habla de desmontar el «Estado tranca», al que considera un freno para el desarrollo del conjunto del país, y de pactos en el Parlamento para sacar adelante medidas económicas graduales. También subraya valores conservadores en lo social, apelando a «familia y patria».

El punto entre dos extremos

Esta posición le ha permitido ocupar el espacio intermedio entre el izquierdismo del MAS, desgastado por la crisis económica, la división interna y el llamado al voto nulo de Evo Morales. En el otro extremo, la derecha liberal de Quiroga.
La cifra de indecisos que mostraban los sondeos no se tradujo en una ola de abstención, sino en un voto válido que buscó alternativa y cambio.
El candidato a vicepresidente, compañero de fórmula, del PDC, Edman «capitán» Lara, sumó bastante y reforzó el mensaje de orden y anticorrupción que Paz llevó a la papeleta de elección. Es exoficial de Policía, crítico del gobierno de Evo Morales y el actual presidente Luis Arce.
Se hizo conocido por sus denuncias de corrupción dentro de departamentos policiales y por una campaña muy activa en redes sociales, que le dio popularidad en barrios urbanos y en el voto joven. En la noche electoral pidió prudencia: «no hemos ganado la final».
Hasta hace unas semanas, muchas encuestas situaban la pelea por el primer lugar entre ‘Tuto’ Quiroga y Samuel Doria Medina. Paz arrancó abajo, fue sumando de forma discreta y, cuando el voto anti-MAS se dispersó, apareció delante. La lectura común entre observadores es que la ciudadanía premió la renovación.
De cara al balotaje del 19 de octubre, el reto de Rodrigo Paz y Edman Lars es ensanchar su base sin perder su marca centrista. La adhesión inmediata de Samuel Doria Medina le facilita parte del camino hacia el voto urbano y de clase media, pero necesitará tender puentes con regiones rurales, voto joven y sectores informales golpeados por la falta de dólares, la escasez de combustible y la inflación.
Por su parte, desde la Alianza Libre ya han anticipado una campaña fuerte para el balotaje del 19 de octubre, con visitas a varias regiones del país. El candidato a vicepresidente, Juan Pablo Velasco, declaró que no estaba previsto enfrentarse en segunda vuelta a Rodrigo Paz, pero que asumirán el reto.

Publicado: agosto 18, 2025, 12:45 pm

La fuente de la noticia es https://www.abc.es/internacional/rodrigo-paz-centrista-nacido-galicia-hijo-expresidente-20250818190559-nt.html

La gran sorpresa de las elecciones en Bolivia tiene nombre y apellidos: Rodrigo Paz Pereira. Contra todo pronóstico, el senador de perfil moderado y candidato del Partido Demócrata Cristiano (PDC) terminó primero en los resultados preliminares y disputará la segunda vuelta con el expresidente Jorge ‘Tuto’ Quiroga, en un escenario que pone fin a dos décadas de hegemonía del MAS, partido de gobierno del presidente Luis Arce y exfuerza de Evo Morales antes de ser expulsado.

Su propuesta, reducir el gasto del Estado, mano dura contra la corrupción y acuerdos legislativos, se ha leído como la opción de cambio y renovación que buscaba una parte del electorado.

Paz nació en Santiago de Compostela en 1967, durante el exilio de sus padres, perseguidos en gobiernos militares. Es hijo del expresidente Jaime Paz Zamora, creció entre España y Bolivia, una vida atravesada por la política desde la cuna. Ese dato conecta su historia personal con la de miles de familias que viven los vaivenes del país fuera de sus fronteras.

Es economista de formación y en su trayectoria ha sido concejal y luego presidente del Concejo Municipal de Tarija, alcalde de esa ciudad en 2015 y, desde 2020, senador por Tarija. Ese recorrido le ha permitido presentarse como gestor con oficio y conocimiento del Estado.

En campaña, Paz se definió como centrista y reformista, con un discurso de austeridad, recorte de gasto innecesario, eficiencia administrativa y «mano dura» frente a la corrupción.

Habla de desmontar el «Estado tranca», al que considera un freno para el desarrollo del conjunto del país, y de pactos en el Parlamento para sacar adelante medidas económicas graduales. También subraya valores conservadores en lo social, apelando a «familia y patria».

El punto entre dos extremos

Esta posición le ha permitido ocupar el espacio intermedio entre el izquierdismo del MAS, desgastado por la crisis económica, la división interna y el llamado al voto nulo de Evo Morales. En el otro extremo, la derecha liberal de Quiroga.

La cifra de indecisos que mostraban los sondeos no se tradujo en una ola de abstención, sino en un voto válido que buscó alternativa y cambio.

El candidato a vicepresidente, compañero de fórmula, del PDC, Edman «capitán» Lara, sumó bastante y reforzó el mensaje de orden y anticorrupción que Paz llevó a la papeleta de elección. Es exoficial de Policía, crítico del gobierno de Evo Morales y el actual presidente Luis Arce.

Se hizo conocido por sus denuncias de corrupción dentro de departamentos policiales y por una campaña muy activa en redes sociales, que le dio popularidad en barrios urbanos y en el voto joven. En la noche electoral pidió prudencia: «no hemos ganado la final».

Hasta hace unas semanas, muchas encuestas situaban la pelea por el primer lugar entre ‘Tuto’ Quiroga y Samuel Doria Medina. Paz arrancó abajo, fue sumando de forma discreta y, cuando el voto anti-MAS se dispersó, apareció delante. La lectura común entre observadores es que la ciudadanía premió la renovación.

De cara al balotaje del 19 de octubre, el reto de Rodrigo Paz y Edman Lars es ensanchar su base sin perder su marca centrista. La adhesión inmediata de Samuel Doria Medina le facilita parte del camino hacia el voto urbano y de clase media, pero necesitará tender puentes con regiones rurales, voto joven y sectores informales golpeados por la falta de dólares, la escasez de combustible y la inflación.

Por su parte, desde la Alianza Libre ya han anticipado una campaña fuerte para el balotaje del 19 de octubre, con visitas a varias regiones del país. El candidato a vicepresidente, Juan Pablo Velasco, declaró que no estaba previsto enfrentarse en segunda vuelta a Rodrigo Paz, pero que asumirán el reto.

Artículos Relacionados