Publicado: julio 18, 2025, 10:45 pm
La fuente de la noticia es https://www.abc.es/internacional/escandalo-mexico-contratacion-narco-politico-afin-lopez-20250718205618-di.html
Una trama policial con epicentro en el crimen organizado vuelve a sacudir al oficialismo en México. Adán Augusto López Hernández, jefe de la bancada de senadores del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), está en el centro de todas las miradas. Hace una semana, … la Justicia decretó una orden de captura contra el exsecretario de Seguridad del estado de Tabasco, Hernán Bermúdez, por supuesta vinculación con el narco. Bermúdez integró el gabinete de López Hernández cuando este era gobernador de dicho estado, el mismo donde inició su carrera política el expresidente Andrés Manuel López Obrador.
El exmandatario aparece tocado en el caso porque López Hernández fue su secretario de Gobernación durante toda la segunda mitad de su mandato, entre 2018 y 2024. Ambos políticos se conocen desde la adolescencia y López Hernández actualmente promueve al hijo de López Obrador – Andrés López Beltrán – como potencial candidato a la presidencia en 2030.
Bermúdez, que escapó del país hace una semana, está señalado por ser uno de los artífices del llamado cártel de La Barredora, grupo criminal asociado al cártel de Jalisco Nueva Generación y dedicado, fundamentalmente, al robo de hidrocarburos para su posterior comercialización en el mercado negro.
Tabasco es el corazón del negocio petrolero en México y durante décadas fue uno de los estados más pacíficos del país, con muy poca criminalidad. La irrupción de La Barredora lo convirtió en pocos meses en uno de los lugares más violentos con tiroteos recurrentes, auge de desaparecidos y atentados en la vía pública.
Todo sucede en paralelo a una agresiva campaña de la presidenta Claudia Sheinbaum para combatir el robo de combustibles, lo que en México se conoce como «huachicoleo». Esta práctica representa pérdidas millonarias en dólares cada año, ya que en general suelen ser atracados los oleoductos de Pemex, la empresa petrolera estatal. El drama del «huachicoleo» es también un problema para las finanzas públicas.
El actual gobernador tabasqueño, Javier May, ha prometido ir hasta las últimas consecuencias para atrapar a Bermúdez. May es rival de López Hernández en la política de su estado y fue el primero en señalar la vinculación entre el coordinador de los senadores y el ahora prófugo.
López Hernández lleva días sin aparecer en público y guarda silencio. Este suele ser su comportamiento frente a los escándalos: cuando el año pasado lo acusaron de presuntos desfalcos en el Senado, también optó por esfumarse.
Sheinbaum lo respaldó este jueves, como el pasado miércoles lo hizo la bancada de Morena en el Senado, y consideró que debe haber pruebas en su contra, no dichos ni suposiciones.
«Nosotros no cubrimos a nadie, pero tiene que haber pruebas; no un dicho, no una suposición de cualquier persona, y particularmente del senador Adán Augusto. Entonces, es muy importante que se sepa a partir de cuándo se empezó a investigar a esta persona, porque no tenía investigaciones previas», dijo la mandataria desde el Palacio Nacional.
Por lo pronto, la Comisión de Honestidad y Justicia de Morena suspendió los derechos de Bermúdez, quien se afilió al partido en 2022 por invitación del propio López Hernández. La dirigente del partido, Luisa María Alcalde, anticipó su expulsión.
Presión desde la Casa Blanca
En paralelo a este caso, Donald Trump insistió esta semana en que el Gobierno mexicano es «inactivo» en el combate al narcotráfico por «miedo a los cárteles». Cada mención de Trump al tema enciende las quejas de la oposición, que señala que en realidad el Gobierno no actúa debido a los supuestos vínculos del narcotráfico con el régimen iniciado por López Obrador.
Desde que regresó a la Casa Blanca, Trump ha ejercido una fuerte presión sobre el Gobierno de México por el tráfico de drogas, particularmente del fentanilo. Sheinbaum ha tenido que ceder a todas las exigencias de Estados Unidos, lo que incluyó, entre otras cosas, la entrega a aquel país de 29 criminales vinculados al narcotráfico.
En ese marco, Ovidio Guzmán López, hijo del Chapo, recientemente se declaró culpable en Estados Unidos de varios cargos tras un acuerdo con el Departamento de Justicia. Hoy por hoy está bajo resguardo en una ubicación secreta y se espera que en breve aporte datos sobre los supuestos nexos entre el cártel de Sinaloa y la clase política mexicana.