El senador colombiano Miguel Uribe es intervenido de urgencia tras presentar sangrado intracerebral

«El paciente Miguel Uribe Turbay requirió traslado hace unos minutos a la sala de cirugía para intervención neuroquirúrgica de urgencia por evidencia clínica e imagenológica de sangrado intracerebral agudo», dice el comunicado que a las cuatro de la tarde de hoy lunes emitió … la Fundación Santa Fe, centro hospitalario donde permanece recluido en cuidados intensivos el senador y precandidato presidencial. De inmediato, su familia emitió un comunicado anotando que el sangrado se deriva de la cirugía que le hicieran el domingo, complementaria a la que tuvo tras el atentado: «Hace pocos minutos a Miguel se le presentó una pequeña hemorragia después de la intervención de ayer», y pide oraciones para su salud.
En su comunicado inicial, la Fundación Santa Fe había aclarado el alcance y resultado de la intervención: «El control tomográfico cerebral postoperatorio evidencia los resultados esperados sin observarse cambios significativos adicionales a los previamente identificados» y señaló que el senador «permanece hemodinámicamente estable y su condición clínica sigue siendo crítica, con pronóstico neurológico reservado». Pero sobrevino la hemorragia que es atendida ahora.
Las alarmas están prendidas en estas horas y aumenta la atención pues, con el paso de los días y la situación grave, pero estable, se había instalado la sensación de que la recuperación de Uribe Turbay es posible y podrá superar positivamente el atentado contra su vida, que sufrió el pasado sábado 7 de junio al final de un mitin en Bogotá. La evolución de la salud del precandidato presidencial, a lo largo de la semana posterior al atentado, se ha mantenido en estado crítico, ahora con restricciones de acceso al tercer piso de la institución médica donde permanece en la UCI, para evitar infecciones, y con paso exclusivo para su esposa y para padre, como lo informó Caracol Radio el domingo pasado.

Antes de los comunicados de hoy, la Fundación Santa Fe había emitido un comunicado el viernes -no dieron partes durante el fin de semana- anotando una leve mejoría: «Muestra una respuesta al manejo instaurado reflejado en leve disminución de su presión intracraneana, con valores de perfusión cerebral con tendencia a la estabilidad. De continuar con esta evolución clínica, se realizará un nuevo control imagenológico cerebral en los próximos días para evaluar cambios, hallazgos y revaloración de las lesiones».

Avanza la investigación

Mientras la recuperación de Miguel Uribe Turbay parece ralentizarse, la Fiscalía General avanza con celeridad en la detención de los implicados, como sucedió este sábado pasado con la captura de Katerine Andrea Martínez, acusada de participar en el atentado y señalada como la mujer que acompaña a alias El costeño o Byron en los vídeos previos al atentado y, al parecer, fue quien le entregó el arma al sicario, además de pagar la moto que lo llevó hasta el barrio Modelia, al suroccidente de la capital. Ella no aceptó los cargos por «tentativa de homicidio agravado, fabricación, tráfico, porte o tenencia de armas de fuego, accesorios, partes o municiones, y uso de menores de edad en la comisión de delitos». Martínez, de 19 años y bajo el alias de Gabriela, fue capturada en Florencia, Caquetá, al occidente del país.
A media que van cayendo los acusados de ejecutar el crimen en Colombia, el Gobierno, a través del ministro de Defensa, Pedro Sánchez, anunció el sábado que están activados todos los canales de cooperación internacional, donde «la Embajada de los Estados Unidos, así como las embajadas del Reino Unido y de los Emiratos Árabes Unidos, han puesto a disposición todas sus capacidades para contribuir con información útil que permita identificar, ubicar y neutralizar esta amenaza, y prevenir que hechos como estos se repitan», señaló tras una corta visita a Uribe Turbay. Y anotó que «es evidente que los grupos criminales tienden a ser transnacionales; por tanto, la respuesta es y será de la mano con la comunidad internacional. Las fronteras no son barreras para ubicar y capturar a los responsables».