Publicado: marzo 4, 2025, 5:44 am
La fuente de la noticia es https://www.abc.es/internacional/alemania-deporta-decenas-afganos-conservadores-piden-paralizar-20250304122258-nt.html

Un Airbus A320-214, registrado en la aerolínea ‘Freebird’ y con número de identificación turco ha despegado este martes a las 7:41 con rumbo a Irak. A bordo vuelan 47 personas sin permiso de residencia en Alemania que están siendo deportadas a ese país, … en el que el avión aterrizará en torno a las 14:00 horas. Un vuelo similar está planeado por el Ministerio de Asuntos Exteriores alemán para este miércoles con destino a Afganistán, en medio de peticiones abiertas del grupo parlamentario de la Unión Cristianodemócrata (CDU), que llama a paralizar estos procesos hasta que se constituya un nuevo gobierno, así como a congelar todos los procesos de asilo en relación con Afganistán.
Es un «proceso escandaloso», critica la líder adjunta del grupo parlamentario de la CDU, Andrea Lindholz, «altamente cuestionable». «En un proceso no transparente, se selecciona a personas cuyas identidades aparentemente ya han demostrado ser falsas», acusa. «Las decisiones sobre la entrada desde Afganistán deberían ser responsabilidad del nuevo Gobierno federal», protesta. El trasfondo de las críticas es la negociación que necesariamente debe estar llevando a cabo el Ministerio de Exteriores alemán con los talibanes, para hacer posible el aterrizaje de estos vuelos, y el saldo migratorio positivo que producen, dado que un vuelo de la semana pasada, con un número similar de deportados, trasladó a cambio a Alemania a 155 personas desde Afganistán.
Según la Secretaría de Gobernación, más de la mitad de ellos llegaron a través del programa federal de admisión. El resto de los pasajeros habían entrado en Alemania a través de otros programas de admisión: el procedimiento del personal local, la lista de derechos humanos y el programa puente. Todos los participantes habrían «completado con éxito el procedimiento de admisión y visado, incluidas las entrevistas de seguridad y los controles de las autoridades de seguridad alemanas», según ha garantizado el Ministerio alemán Exteriores.
La Embajada de Alemania en Dusambé (Tayikistán) informa, por otra parte, de un rápido aumento de las solicitudes de visado de afganos. Además de numerosos afganos, las autoridades extranjeras alemanas, las ONG y diversas asociaciones se han dirigido a esta embajada «con la petición urgente» de recibir solicitudes en Dusambé en lugar de Islamabad, debido a los largos tiempos de espera de los visados afganos, de al menos doce meses, que bloquean el proceso esa sede diplomática. Por lo tanto, numerosos afganos se trasladan a Tayikistán, país vecino en el que los tiempos de espera son comparativamente cortos y donde los ciudadanos afganos «solo cumplen el período de espera de 6 meses» en el país para lograr la jurisdicción diplomática.
El problema es que, dado que cruzar la frontera entre Afganistán y Tayikistán «también es posible sin pasaporte», «no se puede comprobar debidamente la residencia ni la identidad de la persona». Además de »la falta de personal y las limitadas capacidades espaciales«, la situación se ve agravada por el hecho de que »nadie en la delegación puede hablar y escribir farsi y pastún« y, por lo tanto, no se puede verificar la autenticidad de los documentos afganos. También hay una falta de »los conocimientos previos necesarios de los miembros conocidos de los talibanes u otros miembros de organizaciones terroristas«. La autoridad no se ve preparada para gestionar tal cantidad de solicitudes y tampoco puede garantizar controles de seguridad adecuados, de manera que ha pedido a Berlín la retirada de esta competencia. El Ministerio de Exteriores, sin embargo, ha rechazado la solicitud.
Alemania ha acogido a unos 35.000 afganos que se consideran personal local o están en peligro desde que los talibanes tomaron el poder, sin incluir las admisiones en el contexto de la reunificación familiar. Otros 12.000 afganos, que ya han recibido una confirmación de admisión por parte del Gobierno alemán, siguen esperando salir del país. Pero estos programas de admisión humanitaria del Gobierno alemán han sido criticados desde el principio por sus lagunas de seguridad. ‘Business Insider’ ha informado recientemente sobre un documento de la Oficina Federal para la Protección de la Constitución (BfV) en el que el jefe del Departamento 6, responsable del «islamismo y el terrorismo islamista», advierte de un riesgo persistente y «significativamente aumentado» de abusos en el Programa Federal de Admisión de Afganistán (BAP).