Las condiciones económicas y regulatorias actuales del país no permiten garantizar los derechos laborales de los trabajadores, al punto que, en los dos últimos años, se han perdido 1.257.420 empleos en Venezuela, indica la abogada Maryolga Girán, asesora laboral de Conindustria y presidenta del escritorio jurídico Girán Abogados & Asociados.
Precisó además que 2.291.851 de personas están desempleadas y 5.500.000 conforman la masa de trabajadores informales del país.
Para Giran, la situación laboral es tan grave que no se solventa solo con un cambio de gobierno, por ello cree pertinente que la solución pasa por un consenso entre la empresa y los trabajadores. “No trabajemos por lo que necesitamos, luchemos por lo que nos merecemos”, subrayó.
Es recomendable además trabajar en comunicaciones estratégicas con nuestros colaboradores, en un mensaje claro sobre lo que estemos haciendo, así como prestar atención a los gremios”.
Es importante resaltar que las protestas que han sacudido el país durante más de 60 días han colapsado las vialidades de muchas ciudades y eso ha sido motivo de ausentismo laboral involuntario.
Algunas empresas han asumido que esta dinámica ha modificado el horario laboral. Entre imposibilidad de acceso a la fuente de empleo y la incorporación de la gente a las marchas y manifestaciones, se ha producido un reacomodo en las jornadas.
“La situación actual afecta a las personas en su rendimiento, en su desempeño laboral, esto forma parte de la Venezuela de 2017” y complementa la abogada Girán.
“Es un acto heroico que el empresario venezolano hace al cumplir la Ley Orgánica del Trabajo de 2012, que es la expresión del ´Plan de la Patria´ que busca acabar con el capitalismo para darle paso al socialismo. Es un instrumento legal donde el ex presidente Chávez recogió toda la reforma constitucional rechazada en 2007 por los venezolanos, y la impuso al país. Lo que se trata es de implantar una ideología en la relación laboral, la del socialismo”.
Dijo que la ley “no busca el bienestar del trabajador ni la productividad, sino alcanzar los fines del Estado, que están muy bien definidos, cuando la ley dice que esos fines son la preservación de la revolución y el triunfo del socialismo sobre el capitalismo. Por eso hay que destruir las bases capitalistas de la sociedad”.
CARA A CARA
Por su parte, Francisco Sananez, presidente de Empresas PMC y ex presidente del IESA, abordó la generación de bienestar desde el contexto socio-laboral.
En este sentido, recomendó desarrollar prácticas nuevas en el contexto laboral venezolano, como encuentros frecuentes cara a cara con los trabajadores donde participe la línea de mando de la empresa; incrementar los bonos de productividad; y la práctica de valores como transparencia organizacional y financiera.
Estas medidas son ya realidades insoslayables para la empresa en Venezuela, indica Francisco Sananez, quien ahora dirige una empresa del sector agroindustrial.
“Es vital incidir positivamente en el ambiente social del trabajador -su comunidad, su familia- para promover su bienestar de manera más integral”, opinó.