Publicado: febrero 22, 2025, 6:15 am
Sergio Ramos y Pilar Rubio podrían convertirse en el mejor ejemplo del proverbio «distance makes the heart grow fonder«, que hace referencia a que estar físicamente separado de la persona a la que quieres, aumenta los sentimientos de amor. Se trata de un nuevo desafío para su historia de amor mientras dure el fichaje del futbolista por el Rayados de Monterrey.
Y es que en vez de acompañar al sevillano a México, la presentadora -así como los hijos del matrimonio-, continuarán viviendo en Sevilla manteniendo la relación como hasta ahora, con el único cambio de la distancia de por medio, que es lo que se conoce como living apart together.
Aunque supone un ajuste para su día a día, lo cierto es que Pilar Rubio y Sergio Ramos tienen una consolidada base entre ellos como para sobrellevar esta etapa sin que peligre su historia de amor: se apoyan al máximo en sus proyectos laborales, llevan más de 10 años juntos y tienen 4 hijos en común.
Pero antes de ser una de las parejas más queridas del país, su historia comenzó por azar: Pilar Rubio hizo un reportaje en el año 2008 sobre un concierto de Andy y Lucas para Sé lo que hicisteis y cruzó unas palabras con el futbolista, que fue uno de los invitados.
Y aunque Sergio se las ingenió para conseguir su número y escribirle, nada más sucedería entre ellos en aquel momento. Fue en el año 2012 cuando coincidieron en la gala de la celebración de la Eurocopa y, al poco tiempo, empezaron a salir juntos.
De hecho, también el fútbol ha ido formando parte siempre de su historia de amor cuando reservaron su primer posado como pareja para la Gala de Balón de Oro de aquel mismo año. Ya que los dos tenían ilusión por ser padres, y con una relación que iba viento en popa, en 2014, nació el primer hijo de la pareja, Sergio Jr.
La familia formada por el futbolista y la presentadora siguió creciendo con la llegada de Marco en 2015 y Alejandro en marzo de 2018. Fue unos meses después del tercer hijo cuando Sergio le pidió matrimonio a Pilar, en julio compartieron un post en Instagram donde anunciaban que se habían comprometido.
La suya fue una boda que dio la vuelta al mundo, ya que entre sus más de 400 invitados que se desplazaron a Sevilla estaban David y Victoria Beckham. Una celebración que tuvo un concierto y donde sus pequeños no faltaron y además acudieron vestidos a juego con su padre.
Si por aquel entonces ya eran una familia numerosa, en 2020 la familia creció un poco más con la llegada del pequeño Máximo Adriano, aunque era algo que ella misma no había llegado a imaginarse. «Nunca lo pensé, no lo soñé ni estaba en mis planes tener una familia numerosa«, declaró meses antes de dar a luz.
¿En qué consiste el ‘living apart together’?
El living apart together, que también se abrevia por sus siglas como «LAT» es un modelo relacional, que arrancó en los Países Bajos en la década de los 70 por la película Frank y Eva, quienes vivían su amor de esta manera. Aunque no fue hasta décadas después que alcanzó su pico de popularidad.
Durante los 2000, Gran Bretaña era el mejor ejemplo de parejas LAT con un 10% de adultos en este tipo de relaciones, pero también en Bélgica, Francia, Alemania o Noruega, donde las parejas empezaban a apostar por un amor muy alejado del que habían visto a sus padres.
Y es que a diferencia de esas anteriores generaciones, que concebían la relación sentimental como sinónimo de convivencia, el living apart together es mantener una relación estable, pero sin vivir bajo el mismo techo, la decisión que habrían tomado Pilar y Sergio ante la nueva etapa profesional que se abre en México para el futbolista.
Sin embargo, la única diferencia en esta fase que empezará su matrimonio, es el cambio de convivencia por la distancia. Un caso que, salvando las distancias, recuerda al de Helena Bonham Carter y Tim Burton, quienes vivían en dos casas juntas, pero por separado, siendo la prueba de que la felicidad no está sujeta a compartir el mismo techo.
Si bien socialmente hay parejas que optan por este modelo debido a sus propias condiciones socioeconómicas, no es el caso de Sergio Ramos y Pilar Rubio. En su caso, los motivos que les habrían llevado a decantarse por ese sistema tienen más relación con la vida familiar de los pequeños (así como la carrera profesional de la presentadora en España, que ya tendría una serie de compromisos en su agenda cerrados).
Desde la terapia de pareja, a todo cambio o nuevo desafío, se le puede sacar un aspecto positivo, y lo mismo sucede con el living apart together que practicarán el sevillano y la madrileña.
Y es que al haber decidido de mutuo acuerdo vivir separados y no renunciar a la relación, apuestan por priorizar su amor, pero también por potenciar la confianza y honestidad entre ellos, centrarse en sus objetivos comunes, teniendo claro que esto es algo temporal -de años, quizás, pero temporal-, pero quieren seguir avanzando con la relación.
Además, esta alternativa a la convivencia tradicional significa que Sergio y Pilar se comprometerán a seguir formando parte de la vida del otro (con viajes, llamadas…) también favorece que surjan momentos pasionales en los encuentros, que el tiempo compartido es de calidad, porque se sabe que hay menos disposición que antes y desaparecen de la ecuación las tensiones de la convivencia que dan lugar a esos pequeños roces.
