Publicado: abril 7, 2025, 1:30 pm
La guerra continúa en Ucrania semanas después de alto al fuego parcial fallido -acordado el pasado mes de marzo bajo el auspicio de Estados Unidos, de 30 días y limitado a las infraestructuras energéticas- que tanto Kiev como Moscú se han acusado mutuamente de romper. Uno de los últimos ataques se produjo este viernes sobre la localidad de Krivói Rog, la ciudad natal del presidente Volodímir Zelenski, donde el balance de fallecidos se ha elevado este lunes hasta los 20 fallecidos. Una cifra que podría aumentar, ya que hay más de 74 heridos entre las víctimas del ataque, cuatro de ellos menores en estado grave.
Las autoridades ucranianas han lamentado que el ataque ha supuesto la muerte de 9 menores de edad -a causa del impacto de un misil ruso contra una zona residencial-, la mayor cantidad de víctimas menores en un ataque desde 2022. Kiev ha anunciado que solicitará al Consejo de Seguridad de la ONU y al Consejo Permanente de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE) una reunión urgente a raíz del ataque «para poner el foco sobre los crímenes rusos», según anunció el ministro de Exteriores ucraniano, Andrí Sibiga.
«Rusia ha atacado zonas de juego infantil en una zona residencial. Con una ojiva de racimo para maximizar las bajas», apuntó Sibiga, que ha pedido «una condena contundente» y «acciones decisivas» sobre las acciones rusas: «Rusia debe poner fin al terror contra los niños y los civiles ucranianas, responder a la propuesta de alto el fuego completo de EEUU, que Ucrania ya ha aceptado, y poner fin a la guerra», ha señalado.
Moscú lo niega y exige «respuestas» a sus exigencias
Rusia ha negado rotundamente los ataques contra objetivos civiles en la ciudad natal de Zelenski: «Nuestros militares atacan exclusivamente objetivos militares o cuasimilitares. No se efectúan ataques contra la infraestructura social», ha asegurado el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, en su rueda de prensa telefónica diaria.
En su declaración de este lunes, Peskov ha aprovechado para anunciar que Moscú no aceptará un alto al fuego en Ucrania hasta que el acuerdo responda a las exigencias rusas. El portavoz aseguró que Putin «apoya efectivamente» la necesidad de un alto al fuego, pero reiteró que, para valorar cualquier propuesta, «antes habrá que responder a una serie de preguntas» que, de momento, «nadie ha respondido».
Desde Ucrania, el presidente Zelenski hizo un llamamiento este domingo a la comunidad internacional para redoblar la presión sobre el Kremlin ante la continuidad de los «ataques diarios rusos contra Ucrania»: «Vale la pena dirigir todos los esfuerzos a garantizar la seguridad y acercar la paz», subrayó Zelenski este domingo, a las puertas de una semana clave en las negociaciones entre Ucrania y Estados Unidos a cuenta de las tierras raras.
Ambos hablarán por separado con EEUU esta semana
Tanto Kiev como Moscú mantendrán esta semana nuevas reuniones bilaterales con Estados Unidos: la semana pasada el asesor del Kremlin para asuntos económicos, Kiril Dmítriev, se convirtió en el primer emisario ruso en viajar a EEUU desde el inicio de la guerra para reunirse con diplomáticos norteamericanos. Un encuentro que, según explicó Dmítriev, se centró en reconstruir las relaciones diplomáticas entre ambas potencias. El emisario del Kremlin adelantó que las conversaciones continuarán esta semana.
Al mismo tiempo, una delegación ucraniana visitará esta semana Estados Unidos para negociar un nuevo acuerdo de tierras raras con representantes de la administración Trump. El pasado 28 de marzo, Washington entregó a Kiev un nuevo texto, que incluye condiciones adicionales sobre el acuerdo cuya firma resultó fallida tras el desencuentro entre Trump y Zelenski el pasado 28 de febrero.
El nuevo borrador -que prevé la creación de un fondo de inversión conjunto para la explotación estadounidense de los minerales ucranianos- obligaría a Ucrania a reconocer como deuda el dinero gastado por Washington en apoyar a Kiev en esta guerra, además de dar prioridad a las empresas estadounidenses en las licitaciones para proyectos de extracción de recursos minerales en Ucrania, según se habría filtrado a medios ucranianos. Hay que recordar que Zelenski dejó claro desde el primer momento que Ucrania no reconocerá en sus negociaciones de paz ninguna deuda por ayuda recibida como donación en el pasado, y que tampoco aceptará condiciones que puedan comprometer las posibilidades del país de ingresar en la Unión Europea.