Publicado: octubre 11, 2017, 9:25 am
Especialistas en el área económica afirman que el ejecutivo tiene como prioridad pagar las deudas, y esto lo hará por medio de la reducción de las importaciones de alimentos y medicinas para la población.
El escenario de un default no puede descartarse en su totalidad ante el precario estado de financiamiento que atraviesa el país, debido a que Rusia y China se negaron a seguir prestándole dinero al país y por el bajo nivel de las reservas internacionales.
A lo largo de este mes el gobierno nacional enfrenta el vencimiento de pequeñas deudas, $28 millones están vinculados a una emisión de deuda de la estatal Electricidad de Caracas.
“La verdadera semana infernal se producirá cerca de Halloween, para el 27 de octubre cuando deben pagar básicamente $1.000 millones, y luego el 2 de noviembre cuando tendrán que pagar otros $1.200 millones”, asegura Russ Dallen, socio gerente de la firma Caracas Capital desde Miami.
Antonio De La Cruz, director ejecutivo de la firma de asesores Inter American Trends señala que el gobierno moverá cielo y tierra para evitar el default, al menos en lo que queda del año, dado el convencimiento de sus máximos líderes de que no podrían sobrevivir en el poder si caen en mora.
“Ellos necesitan empujar esto hasta el 2018. Para el 2018 ellos estiman una recuperación del precio promedio del barril de petróleo y una disminución de la carga de la deuda con relación a lo que fue este año”, explica De La Cruz desde Washington.
Además, De La Cruz agrega que los tenedores de bonos venezolanos ya experimentan una crisis existencial ante dudas de que el régimen bolivariano logre pagar deuda por valor de $3.526 millones que vence a lo largo de las próximas seis semanas.
Estos dos fenómenos combinados le podrían generar al gobierno un colchón financiero de cerca de unos $10.000 millones adicionales, brindándole así un margen de maniobra mucho mayor del que tiene este año.
De La Cruz dijo que a no le sorprendería ver a Maduro reducir o suspender las importaciones de productos, que representan un poco más del 20% cerca de $60.000 millones registrados en el 2012. “Han demostrado que no les importa el bienestar de la población, si eso pone en riesgo su permanencia en el poder”, dijo.
Gracias a los préstamos de Rusia, el estado venezolano había evitado caer en incumplimiento de pagos, pero Dallen señala que no está muy seguro de que los rusos sigan dispuestos a hacerlo nuevamente en los próximos días, porque Venezuela incumplió el pago de más de $1,000 millones en obligaciones contraídas con Rusia
Las agencias de calificación de riesgos Fitch y Standard & Poor’s consideran a Venezuela como un país con una alta probabilidad de impago en los próximos seis meses, en vista de que perdió gran parte de su acceso al mercado de crédito internacional con las sanciones impuestas por el gobierno del presidente Donald Trump, que prohíben en Estados Unidos la compra de nuevos bonos venezolanos.