Publicado: febrero 19, 2025, 11:20 am
El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, no se ha quedado de brazos cruzados tras el giro de 180 grados que la nueva administración Trump le está dando dado a la política de EEUU respecto a la guerra de Ucrania y este miércoles ha acusado al mandatario norteamericano de «ayudar a Putin a salir del aislamiento global que se merece».
«Rusia sigue siendo la parte culpable y no se la puede blanquear como si fuera dinero ni encubrir su responsabilidad en la guerra. Esta es una guerra de Putin contra nosotros», ha afirmado visiblemente contrariado por el acercamiento que Moscú y Washington escenificaron este martes en la cumbre bilateral de Riad.
Trump dijo el martes desde Florida que deberían convocarse elecciones en Ucrania, bajo el pretexto de que el índice de popularidad del líder ucraniano ha caído en picado. «Tenemos una situación en la que no hemos celebrado elecciones en Ucrania, en la que tenemos ley marcial, y en la que el índice de aprobación de su líder está por debajo del 4%», dijo sin aportar ningún informe demoscópico que apoye ese dato.
De hecho, las últimas encuestas del Instituto Internacional de Sociología de Kiev dicen lo contrario y sitúan el índice de aprobación de Zelenski en un 57%. «No suelo comentar índices de popularidad, pero eso del 4% viene de Rusia y tenemos pruebas de ello», ha dicho Zelenski, que ha acusado a Trump de vivir «bajo la burbuja de desinformación rusa».
El presidente de Estados Unidos ha sugerido incluso que Kiev empezó la guerra. «Estuvieron ahí presentes durante tres años. Deberían haberle puesto fin tras tres años. Nunca debieron de haber empezado [la guerra]. Se podría haber llegado a un acuerdo», ha subrayado sobre el conflicto iniciado por el presidente ruso, Vladímir Putin, en febrero de 2022.
«Estuvieron ahí presentes durante tres años. Deberían haberle puesto fin tras tres años. Nunca debieron de haber empezado [la guerra]. Se podría haber llegado a un acuerdo
Consciente de que Putin no le quiere al frente de Ucrania, Zelenski intuye que EEUU podría estar plegándose a esa exigencia del Kremlin para lograr un acuerdo de paz, pero ha lanzado una advertencia a Trump: «Si alguien quiere sustituirme ahora mismo, eso no funcionará». Es más, ha aprovechado la visita a Kiev del general Keith Kellogg, enviado especial de EEUU para Ucrania, para sugerirle que salga a la calle y «pregunte a los ucranianos» por su opinión respecto a su actual presidente.
No es ningún secreto que Putin sueña con un gobierno prorruso en Ucrania y muchos analistas señalan que su elegido es Víktor Medvedchuk, político ucraniano cercano al Kremlin al que Moscú pretendía entregar la presidencia del país si hubiera triunfado la invasión lanzada hace tres años. Rusia considera ilegítima la presidencia de Zelenski, alegando ahora que su mandato caducó en marzo de 2024, cuando estaban previstas las elecciones presidenciales, que fueron suspendidas debido a la ley marcial decretada por la guerra.
Dentro de Ucrania también han salido algunas voces que piden la convocatoria de elecciones, entre ellas las de opositores a Zelenski como Oleksi Arestovich o el expresidente ucraniano Petró Poroshenko. Sin embargo, parece muy complicado que puedan celebrarse unos comicios libres y democráticos con una guerra en marcha y miles de ucranianos desplazados o exiliados.
Trump quiere quedarse los recursos ucranianos
Zelenski también ha hecho referencia al interés de EEUU en las llamadas tierras raras ucranianas, ricas en minerales estratégicos como el litio, el cobalto o el escandio. Al respecto, ha confirmado que la administración Trump le envió un documento en el que le pedía quedarse con la mitad de esos recursos naturales a cambio de que EEUU mantuviera su apoyo a Ucrania.
«El documento no era claro, solo era claro en una cosa, que debíamos dar el 50% de todo lo especificado en el borrador», ha dicho, en referencia a ese documento redactado por Washington y que se ha mostrado dispuesto a hacer público si es necesario.
La propuesta en cuestión fue presentada hace una semana por el secretario del Tesoro, Scott Bessent, durante su visita a Kiev, pero el gobierno de Zelenski no la ha aceptado. Según fuentes con acceso al documento, Washington pedía a Ucrania la mitad de sus tierras raras como pago por la ayuda que ha recibido de EEUU, que la administración Trump cifra en 500.000 millones de dólares.
Zelenski, sin embargo, ha refutado este miércoles el montante de esa ayuda norteamericana: «Tenemos que aclarar esos números. Desafortunadamente, no coinciden con la realidad. La guerra nos ha costado 320.000 millones de dólares; 120.000 millones cubiertos por los contribuyentes ucranianos y 200.000 millones suministrados por EEUU y la UE, sobre todo en ayuda militar», ha dicho Zelenski, que ha detallado que la ayuda estadounidense asciende a 67.000 millones en asistencia militar y 31.500 en ayuda directa al presupuesto ucraniano.
Rusia: «Nos alejamos del abismo»
Ajenos al enfado de Zelenski, en Moscú aplauden el restablecimiento de las relaciones diplomáticas con EEUU tras la llegada de Trump a la Casa Blanca. El ministro ruso de Exteriores, Sergei Lavrov, ha afirmado que Moscú y Washington han comenzado a «alejarse del borde del abismo» al que se habían asomado en estos últimos años y ha culpado al gobierno de Joe Biden de la escalada.
«Hemos comenzado a alejarnos del borde del abismo al que llevó nuestras relaciones con EEUU la administración Biden, pero estos son solo los primeros pasos», ha dicho Lavrov en su intervención ante la Duma, donde ha calificado de «positivas» y «correctas» las conversaciones del martes en Arabia Saudí con su homólogo estadounidense, Marco Rubio.
En la misma línea se ha expresado el propio Putin durante una visita a San Petersburgo. «Valoro altamente las conversaciones. Hay resultados y concedemos prioridad a la situación en Ucrania», ha dicho el mandatario ruso, que también ha asegurado que no están dejando de lado a Kiev en las negociaciones, a pesar de que así quedó patente en Riad: «Durante la conversación telefónica que mantuve con el presidente Trump, me dijo que EEUU parte de que el proceso negociador transcurrirá con participación de Rusia y de Ucrania. Nadie excluye a Ucrania».
Trump descarta enviar tropas de paz
Trump afirmó además la pasada noche en Florida que no se opone al despliegue de tropas europeas de paz en Ucrania como parte de un potencial acuerdo de paz en el país. «Tener tropas allí estaría bien. No me opondría en absoluto», dijo en declaraciones a la prensa, agregando que si Francia o Reino Unido apoyan esta iniciativa está «totalmente a favor» y «estaría bien». No obstante, ha descartado tropas estadounidenses en este eventual despliegue de paz. «Nosotros estamos muy lejos», ha zanajado.
Europa, por su parte, sigue en una especie de shock tras el volantazo de Trump a la política exterior de EEUU. El presidente francés, Emmanuel Macron, ha convocado este miércoles una nueva reunión de crisis sobre Ucrania tras la del lunes, esta vez por videoconferencia, para analizar las consecuencias de la cumbre ruso-estadounidense. Desde el Elíseo no han ocultado su estupefacción ante las últimas declaraciones de Trump. «No entendemos muy bien la lógica americana», ha dicho la portavoz del ejecutivo galo, Sophie Primas, que ha calificado esas afirmaciones de «poco comprensibles» y ha pedido al magnate neoyorquino «coherencia».
Por su parte, el ministro de Defensa alemán, Boris Pistorius, ha pedido mantener en secreto por el momento, tanto para Rusia como para EEUU, las medidas que podrían adoptar los países europeos para apoyar a Ucrania: «Yo no voy a poner sobre la mesa ni ante Donald Trump ni ante Vladímir Putin lo que estoy dispuesto a hacer y lo que no hasta que no esté claro que vamos a participar en el proceso de paz».