El primer ministro húngaro, Viktor Orban , quiere eliminar las sanciones de la Unión Europea contra Rusia en el contexto de la guerra en Ucrania, tal y como ha expresado en una entrevista en una radio estatal. Orban cree que la UE tendrá que adaptarse a una nueva era con el regreso de Donald Trump a la Casa Blanca y debería crear una relación con Rusia que esté «libre de sanciones» . Desde que comenzara la invasión a Ucrania hace casi tres años, la UE ha sido el principal apoyo armamentístico y presupuestario de Kiev, tanto con ayudas directas como a través de sanciones económicas a Moscú. De hecho, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen , ha incluso pretendido que las potencias asiáticas entren en esta misma dinámica. En 2023, en una cumbre en Pekín, la alemana destacó la « necesidad de que China use toda su influencia sobre Rusia para detener esta guerra de agresión y se comprometa con el plan de paz de Ucrania». También insistió en que el Gobierno de Xi se debía abstener «de suministrar equipamiento letal a Rusia», para así «impedir sus intentos de socavar el impacto de las sanciones». Hace precisamente un año, la UE ultimó un nuevo paquete de sanciones contra el Kremlin, en un contexto en el que las ayudas que recibía Zelenski eran cada vez menores. Así, Bruselas acordó asignar a Ucrania 50.000 millones de euros entre 2024 y 2028. También se cerró un nuevo paquete de sanciones de los países de la Unión Europea contra Rusia, que se comprometían a ingresar más personas físicas y jurídicas en las listas de congelación de activos y también prohibirles viajar a territorio comunitario . Los tres países bálticos y Polonia propusieron vetar que las importaciones de aluminio ruso se incluyeran entre las restricciones.