Towana Looney se ha convertido en la receptora más longeva de un trasplante de órgano de cerdo funcional. Towana Looney , lleva 61 días con un riñón de cerdo genéticamente modificado funcionando normalmente, superando todos los casos anteriores. Looney, una mujer de 53 años de Alabama, fue la tercera persona en el mundo en recibir un trasplante de riñón de un cerdo modificado genéticamente. Looney donó un riñón a su madre en 1999, pero más tarde desarrolló insuficiencia renal debido a complicaciones de un embarazo. Tras ocho años en lista de espera, recibió el trasplante el 25 de noviembre de 2024 en Nueva York. El cerdo fue preparado por Revivicor , una empresa que modifica genes para prevenir rechazo inmunológico y garantizar la compatibilidad con humanos. Desde el principio Looney se encontró en mejor estado de salud que pacientes anteriores, lo que aumentaba las posibilidades de éxito. Fue dada de alta 11 días después y permanecerá bajo observación por tres meses. «Soy una súper mujer», señaló a Associated Press Looney, quien, llena de energía, ha sorprendido a su familia con largas caminatas por Nueva York mientras continúa su recuperación. «Es una nueva oportunidad en la vida», agregó. El trasplante de Looney representó un avance significativo en los xenotrasplantes, donde órganos de animales son modificados genéticamente para ser compatibles con humanos. Aunque cuatro estadounidenses han recibido previamente órganos de cerdo (dos corazones y dos riñones), ninguno sobrevivió más de dos meses. «El riñón de Towana está funcionando de forma normal», señaló Montgomery. Se espera que Looney pueda regresar a su hogar en Gadsden, Alabama, en aproximadamente un mes. Hace algunos años, David Bennett se convirtió en la primera persona en recibir un trasplante de corazón de cerdo. Sin embargo, falleció dos meses después de la cirugía: se descubrió que el corazón estaba infectado con un virus porcino. A principios de 2024, Richard Slayman fue el primer paciente en recibir un trasplante de riñón de cerdo modificado genéticamente. Falleció dos meses después de la operación, aunque el hospital que lo atendió aseguró en un comunicado que no había «ningún indicio» de que su muerte estuviera relacionada con la operación. En abril, Lisa Pisano se convirtió en la segunda persona en recibir un órgano de este tipo y, durante la intervención, también se le implantó una bomba cardíaca. Sin embargo, el riñón falló debido a un riego sanguíneo insuficiente y tuvo que ser extirpado un mes después. Pisano falleció en julio. Richard Slayman, de 62 años, se convirtió en el primer paciente que recibe un riñón de un cerdo genéticamente modificado. Sin embargo, falleció al cabo de un mes debido a las complicaciones. Con este éxito, los científicos esperan avanzar hacia los primeros estudios formales de xenotrasplantes. United Therapeutics , el proveedor del riñón de Looney, ya ha solicitado a la FDA (autoridades sanitarias de EE.UU.) autorización para iniciar ensayos clínicos. Towana Looney también ha asumido el papel de embajadora, brindando apoyo a otros pacientes en espera de trasplantes, compartiendo su experiencia y animándolos a tomar decisiones basadas en su fe y corazón. Aunque no se puede predecir cuánto tiempo funcionará su riñón, Montgomery destacó que «todavía se desconocen cuáles serán los próximos desafíos, porque es la primera vez que llegamos tan lejos». Sin embargo, este avance ya está marcando una diferencia en la ciencia médica y en la vida de muchas personas.