Publicado: noviembre 15, 2025, 1:30 pm
La sede de la cadena francesa BFM TV en París ha sido evacuada por motivos de seguridad este sábado tras una falsa amenaza de bomba que ha obligado a suspender sus emisiones en directo. Hasta el lugar han acudido también artificieros, así como cinco equipos con perros detectores de explosivos de la Policía, que consideró «suficientemente creíble» la alerta.
«Nuestras oficinas han sido evacuadas tras una alerta de seguridad», ha anunciado el propio medio en su cuenta de X, antes de confirmar que su programación se ha visto «temporalmente interrumpida en todos los canales».
Según informa el medio local Le Parisien, a las 15.19 h la programación del canal de noticias 24 horas BFMTV se vio interrumpida de forma abrupta por un anuncio de amenaza de bomba, que obligó a los trabajadores de la cadena a evacuar el edificio que alberga la redacción, situada en el distrito 15 de París.
La información en directo que estaban ofreciendo fue cubierta por programas atemporales mientras duró el registro policial, hasta que se excluyó que se hubiera colocado un artefacto. Las fuerzas del orden también interrumpieron el tráfico rodado y del tranvía que circula en las proximidades del edificio.
«Nuestros equipos están trabajando para reanudar la programación lo antes posible», indicaba la compañía en un mensaje en redes publicado a las 16.27 h.
Casi hora y media después de este mensaje, a las 17.55 h, la propia cadena ha informado del fin de la amenaza de bomba: «Tras la intervención de las fuerzas del orden, nuestros equipos han regresado a los estudios«, han indicado a través de un mensaje publicado en redes sociales, donde han dado las gracias a los agentes «por su rápida respuesta».
Según explican, sus emisoras «están reanudando gradualmente su programación. Gracias por su paciencia y confianza», han indicado.
Una vez recuperada la emisión, la cadena ha explicado que la redacción fue evacuada a las 15.20 h de la tarde del sábado después de que la Policía recibiese un mensaje de amenaza de bomba que consideraban «suficientemente creíble», de ahí que considerasen evacuar el lugar «por seguridad».
Las investigaciones policiales se centran ahora en tratar de determinar el origen de la falsa alerta. Si se llega a identificar a algún responsable, se expondría a penas de hasta dos años de cárcel y 30.000 euros de multa.
Este suceso se produce dos días después de la conmemoración del décimo aniversario de los atentados yihadistas del 13 de noviembre de 2015 en París, los peores ataques sufridos por Francia desde la Segunda Guerra Mundial, que causaron la muerte a 132 personas, así como cientos de heridos.
