Publicado: julio 1, 2025, 1:00 am
La okupación es un problema que inquieta a muchos propietarios en España, especialmente cuando tienen segundas viviendas vacías. En el caso de que eso ocurra comienza un tedioso proceso de expulsión . Así, hartos de la tardanza, muchos propietarios deciden poner el piso a la venta, aunque por un precio mucho menor al valor real de mercado. No es una operación para todo el mundo, pero sí llama la atención de los inversores . Ante cualquier ciudadano que se se plantee esta opción, los expertos recomiendan estudiar bien todos los detalles. En este sentido, la abogada experta en derecho inmobiliario y socia fundadora de AF Legis, Arantxa Goenaga, advierte de que el problema principal es que «no te entregan la posesión y no se puede hacer una entrega de llaves como tal» como sí ocurriría en una operación al uso. Es común que quienes afronten esta situación ya tengan estudiada la situación de la persona que usurpa la propiedad y que incluso se plantee un acuerdo extrajudicial: pagar al okupa para que la abandone. Sin embargo, cualquier movimiento debe ser estudiado con detenimiento. Como señala Goenaga, en caso de encontrarse con unos okupas declarados vulnerables «se suspenden los procedimientos» y no pondrán ser expulsados. Asimismo, no es una operación recomendable para un comprador que quiere hacer de esa vivienda su residencia habitual. Principalmente por los plazos, aunque también hay otros condicionantes como que suelen ser casas en las que «no hay mantenimiento». Tampoco el propietario puede saber las condiciones en las que se encuentra: «El vendedor no puede responder» . «El comprador también asume las deudas , impuestos como el IBI o gastos relacionados con la comunidad de propietarios», destaca Goenaga. Como indica, como abogada, no es «partidaria» de este tipo de operaciones a menos que sea un inversor muy especializado y bien asesorado. Pero no para el público general. De hecho, es poco probable que los bancos ofrezcan un préstamo hipotecario: «Se necesitan fondos propios o pedir un préstamo a título personal» . ¿Pero por qué aparecen ahora tantas de estas casas ahora en portales inmobiliarios? Arantxa Goenaga apunta a que esto se debe a la Ley por el Derecho a la Vivienda: «Da garantías a los consumidores que deben saber el estado en el que se encuentra el estado del inmueble». Por otro lado, destaca que «la normativa es más restrictiva con los pisos vacíos» lo que empuja a muchos a poner la casa a la venta, así como que algunos «provienen de ejecuciones inmobiliarias».