Publicado: septiembre 19, 2025, 12:31 am
El Hospital Universitario de Bellvitge de Barcelona ha tenido un papel clave en la validación clínica del primer test en sangre capaz de anticipar la progresión del deterioro cognitivo leve hacia la demencia de Alzheimer, marcando un hito en el diagnóstico precoz de esta enfermedad neurodegenerativa. El test, denominado MAP-AD®, ha sido desarrollado por ADmit Therapeutics , una spin-off del Instituto de Investigación Biomédica de Bellvitge (IDIBELL). A diferencia de otros biomarcadores que solo confirman la presencia de patología cerebral, MAP-AD® ofrece valor pronóstico, permitiendo prever la evolución clínica de cada paciente. Los resultados del estudio han sido publicados en la revista científica ‘ iScience ‘, y el test ya cuenta con el marcado CE-IVDR, lo que permite su aplicación clínica en la Unión Europea. MAP-AD® es un análisis de sangre que evalúa biomarcadores mitocondriales —concretamente la metilación del ADN mitocondrial— y los combina con datos clínicos. Durante años, señala Jordi Gascón, jefe de la Unidad de Memoria del Hospital de Bellvitge y coordinador del estudio, «hemos podido identificar la patología subyacente, pero era muy difícil predecir la evolución clínica . Disponer de una herramienta fiable que anticipe la progresión es un punto de inflexión: nos permite mantener conversaciones más informadas con las familias y guiar mejor las intervenciones, ya sean preventivas, en ensayos clínicos o con las nuevas terapias emergentes». El estudio observacional multicéntrico ha incluido muestras de pacientes con deterioro cognitivo leve y voluntarios sin afectación , procedentes de hospitales catalanes y biobancos internacionales. Marta Barrachina, CEO y cofundadora de ADmit Therapeutics , destaca que «la validación científica y la certificación europea refuerzan la solidez del MAP-AD®, que no solo confirma, sino que anticipa la evolución de la enfermedad. Es un paso decisivo hacia una medicina más personalizada y preventiva». No es este el primer test presentado para detectar el alzhéimer. Varios equipos internacionales han desarrollado y validado pruebas innovadoras que no solo permiten detectar la presencia de la enfermedad, sino también anticipar su progresión clínica, incluso antes de que los síntomas sean evidentes. Uno de estos avances se desarrolló en la Universidad de Washington en St. Louis (EE. UU.) y la Universidad de Lund (Suecia), quienes diseñaron un test basado en la proteína MTBR-tau243, cuyo nivel en sangre refleja con gran precisión la acumulación de tau en el cerebro y la severidad del Alzheimer. Los resultados se publicaron en la revista ‘ Nature Medicine ‘. Este biomarcador no solo diagnostica la enfermedad, sino que puede indicar si los síntomas de una persona se deben efectivamente al Alzheimer o a otra causa, lo que supone una herramienta de enorme utilidad clínica para diferenciar entre tipos de demencia. Por otro lado, un equipo del Barcelonaβeta Brain Research Center (BBRC) —centro impulsado por la Fundación Pasqual Maragall— junto con el Instituto de Investigación del Hospital del Mar, y en colaboración con universidades y hospitales de Suecia e Italia, validó el uso del biomarcador phospho-tau217 (p-tau217) como herramienta fiable para detectar el alzhéimer mediante un análisis de sangre. El estudio, también publicado en ‘ Nature Medicine ‘, demuestra que esta prueba puede diagnosticar la enfermedad de manera no invasiva, lo que representa un cambio de paradigma respecto a métodos anteriores como la punción lumbar (líquido cefalorraquídeo) o la neuroimagen cerebral. Otro estudio realizado por investigadores del Hospital de Sant Pau de Barcelona, y publicado en la revista ‘ JAMA Neurology ‘ confirmó el valor pronóstico de este biomarcador en sangre. Además, otra investigación desde la Universidad de Pittsburgh, también publicada en Nature Medicine , ha desarrollado un test que detecta formas patológicas tempranas de la proteína tau en el líquido cefalorraquídeo, incluso antes de que sean visibles en los escáneres cerebrales. Este avance sugiere que pronto podría trasladarse también a pruebas de sangre, lo que facilitaría aún más el diagnóstico anticipado.