Publicado: enero 30, 2025, 1:00 am
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Washington. El presidente Donald Trump revocó el miércoles un amparo que evitaba que más de 600,000 venezolanos fueran expulsados de Estados Unidos. Además, evalúa enviar a la prisión militar de Guantánamo, en Cuba, a migrantes en situación irregular como parte de su ofensiva contra la inmigración ilegal.
La secretaria de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Kristi Noem, declaró a Fox News que rescindió la medida del Gobierno anterior de conceder a los venezolanos en Estados Unidos 18 meses más de exención de la deportación y acceso a permisos de trabajo a través del programa de Estatus de Protección Temporal (TPS), abriendo la posibilidad de que las protecciones expiren a finales de este año.
Kristi Noem hizo duras declaraciones en contra de venezolanos: “Los habitantes de este país quieren a esta basura fuera; quieren que sus comunidades estén seguras”.
Para muchos sorprendió la decisión de Trump.
Según el Pew Research Center, hasta marzo del 2024 había 1.2 millones de personas elegibles para el TPS o que se habían beneficiado del programa, siendo los venezolanos el grupo más grande.
Centro de detención de migrantes
También se anunció que Trump preparará un centro para migrantes en Guantánamo.
«Firmaré hoy un decreto ordenando a los departamentos de Defensa y Seguridad Interior que comenzarán a preparar las instalaciones para 30,000 migrantes en la bahía de Guantánamo (una base normalmente reservada para presos acusados de terrorismo», asegurando que enviará a «criminales» en situación irregular.
“Algunos de ellos son tan malos que ni siquiera confiamos en que los países los retengan porque no queremos que vuelvan, así que vamos a enviarlos a Guantánamo. Esto duplicará nuestra capacidad inmediatamente, ¿verdad?», acusó. “Es un lugar del que es difícil salir».
La base estadounidense de Guantánamo ya alberga una instalación para migrantes, aparte de la prisión de alta seguridad para extranjeros sospechosos de terrorismo, que se ha utilizado en ocasiones para alojar a haitianos y cubanos recogidos en el mar.
«En un acto de brutalidad, el nuevo gobierno de Estados Unidos anuncia encarcelamiento en Base Naval en Guantánamo, ubicada en territorio de Cuba ilegalmente ocupado, de miles de migrantes que expulsa forzosamente, a los que ubicará junto a las conocidas cárceles de tortura y detención ilegal», expresó el presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, en su cuenta de X.
El canciller, Bruno Rodríguez, estimó que la decisión «muestra desprecio hacia la condición humana y el Derecho Internacional».
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