Publicado: junio 7, 2025, 9:00 pm
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha manifestado que él no decidió que Kilmar Ábrego, el hombre deportado a El Salvador por un «error administrativo» en marzo, volviera a Estados Unidos, donde se enfrentará a cargos federales por transportar ilegalmente a extranjeros, sino que fue el Departamento de Justicia quien gestionó su regreso al país.
«Esa no fue mi decisión», ha declarado el mandatario estadounidense en una entrevista telefónica con la cadena de televisión NBC. «El Departamento de Justicia decidió hacerlo de esa manera», añadió.
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Asimismo, el inquilino de la Casa Blanca ha sostenido que el proceso judicial contra Ábrego debería ser «muy fácil» para los fiscales encargados del caso.
Kilmar Ábrego regresó a suelo estadounidense este viernes desde El Salvador, país en el que se encontraba desde marzo tras ser deportado por la Administración norteamericana en línea con su política de expulsión de inmigrantes establecida desde la vuelta de Trump al Gobierno. Ahora, debe enfrentarse a los cargos de conspiración por transportar a personas extranjeras y por transporte ilegal de extranjeros indocumentados.
En El Salvador ha estado recluido en la cárcel de máxima seguridad conocida como Centro de Confinamiento del Terrorismo (CECOT), creada por el presidente del país, Nayib Bukele, quien afirmó que no negaría la repatriación de un pandillero para enfrentarse a sus cargos si Estados Unidos lo solicitaba.
La fiscal general estadounidense, Pam Bondi, afirmó que cuando cumpla la condena por su cargos en Estados Unidos «regresará a su país de origen, El Salvador».
Por su parte, Ábrego ha negado las acusaciones sobre su pertenencia a la Mara Salvatrucha (MS-13) y su participación en el transporte ilegal de extranjeros.
