Publicado: enero 23, 2025, 6:20 am
Ahora que las armas han callado en la Franja de Gaza, Israel concentra sus esfuerzos militares en otro trozo de Palestina. Las Fuerzas de Defensa israelíes (FDI) lanzaron este martes lo que llaman «operación antiterrorista» en Cisjordania, concretamente en la ciudad de Yenín. Bautizada como «Iron Wall» (Muro de Hierro), se prevé que dure varios días.
Ya lo adelantó el lunes el Jefe de Estado Mayor de las FDI, Herzi Halevi. Israel se estaba preparando para lo que llamó «operaciones significativas» en Cisjordania. «Junto a los intensos preparativos de defensa en la Franja de Gaza, debemos estar preparados para operaciones significativas en Judea y Samaria en los próximos días con el fin de adelantarnos y atrapar a los terroristas antes de que lleguen a nuestros ciudadanos», dijo este teniente general. El régimen israelí utiliza el nombre bíblico, Judea y Samaria, para referirse a Cisjordania.
Este martes, en un comunicado conjunto, las FDI y la agencia de seguridad Shin Bet confirmaron la operación sobre Yenín, en el norte de Cisjordania. Según dijo una fuente militar y recoge The Times of Israel, todo comenzó con una serie de ataques con aviones no tripulados contra infraestructuras utilizadas por lo que llamaron «grupos terroristas».
Los medios de comunicación palestinos informaron de varios ataques aéreos. Las imágenes mostraron helicópteros de la Fuerza Aérea israelí sobrevolando Yenín. Además, según Palestine Chronicle, Israel desplegó francotiradores en el barrio de Al Hadaf, en el campo de Yenín, que abrieron fuego contra los residentes.
Un gran número de tropas, incluyendo fuerzas especiales, agentes del Shin Bet y oficiales de la Policía de Fronteras, entraron en la ciudad. Según el Ejército israelí, el objetivo es «preservar la libertad de acción» de sus tropas en Cisjordania, neutralizar la «infraestructura terrorista» y eliminar «amenazas inminentes».
Las fuerzas de la resistencia palestina activaron las sirenas en Yenín. Según medios palestinos, la incursión coincidió con el bombardeo por aviones no tripulados israelíes de un vehículo vacío cerca de la escuela Al Zahraa, en las inmediaciones del campo de Yenín, mientras helicópteros Apache disparaban al cielo del campo de refugiados.
Diez palestinos muertos (entre ellos un niño)
Como consecuencia de la incursión masiva de las fuerzas israelíes, al menos diez palestinos murieron (entre ellos un niño) y otros 40 resultaron heridos, según datos del Ministerio de Sanidad palestino.
Zaher Yabarin, uno de los líderes políticos de Hamás, acusó al primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, de trasladar la guerra desde Gaza a la Cisjordania ocupada para mantenerse en el poder. Por su parte, Netanyahu dijo en un comunicado difundido por su oficina que con la operación «Iron Wall» estaban «operando de forma sistemática y decisiva contra el eje iraní allí donde envía sus armas, en Gaza, Líbano, Siria, Yemen y Judea y Samaria».
Según el ministro de Finanzas israelí, Bezalel Smotrich, la operación «Muro de hierro» será «intensa» y transformará el nivel de «seguridad» en Cisjordania ocupada. Frente a Israel, la Yihad Islámica hizo un llamamiento a toda la Cisjordania ocupada «para que se enfrente a esta campaña criminal por todos los medios, frustre sus objetivos y consolide la derrota del enemigo para someter la voluntad de nuestro pueblo en Cisjordania y Gaza».
Impedir que Hamás crezca en Cisjordania
Para justificar esta enésima ofensiva militar contra Palestina, Tel Aviv asegura que se busca impedir que Hamás se establezca en Cisjordania aprovechando la liberación de muchos de sus miembros por el alto el fuego en Gaza. Cientos de prisioneros palestinos van a ser liberados en Cisjordania tras el acuerdo sobre los rehenes y el alto el fuego con Hamás, entre ellos muchos condenados por atentados terroristas mortales.
Antes de que comenzara el nuevo asalto israelí, las fuerzas de seguridad de la Autoridad Nacional Palestina (ANP) habían llevado a cabo una operación de semanas de duración. Su objetivo era reafirmar el control de la ciudad, así como del campo de refugiados.
Según medios hebreos como The Times of Israel, la ANP ha estado atacando al llamado Batallón de Yenín, formado por personas afiliadas a Hamás y la Yihad Islámica. De ese modo estaría intentando demostrar al nuevo presidente de Estados Unidos, Donald Trump, que pueden mantener el orden en Cisjordania.
Esta última ofensiva de Israel se produce después de que su ejército llevara a cabo una importante y mortífera operación militar en el norte de Cisjordania en agosto y septiembre. Aquella campaña se denominó «Operación Campamentos de Verano».
