Publicado: agosto 26, 2025, 7:30 pm

El primer ministro de la isla sostiene que el despliegue de buques en la resión es una medida preventiva y estratégica contra el narcotráfico
Calma y cordura. Con motivo del despliegue militar de Estados Unidos en el Caribe y el aumento de las tensiones entre Washington y Caracas, el primer ministro de Curazao, Gilmar Pik Pisas, envió este lunes 25 de agosto un mensaje a los habitantes de la isla: “El gobierno pide a la comunidad de Curazao que se mantenga tranquila y evite viajar a Venezuela hasta nuevo aviso”.
“Nuestro pueblo puede estar tranquilo (…) La presencia militar en el Caribe es una medida preventiva y estratégica contra el tráfico de drogas”, argumentó Pisas, quien hace una semana destacó que Willemstad coopera con esta operación norteamericana por enmarcarse “en las prácticas de trabajo existentes entre nuestros países”.
Mucho cuidado
A mediados de julio, la cancillería del Reino de los Países Bajos -del cual forma parte Curazao- notificó formalmente a las islas del Caribe Neerlandés en torno a los “riesgos de seguridad” inherentes a cualquier viaje a Venezuela.
La Haya ubicó a Venezuela en la lista de países de “código rojo”; es decir, a los que recomienda no viajar por considerarlos “demasiado peligrosos”. “Los extranjeros en Venezuela corren el riesgo de ser arrestados sin una razón clara”, indica el documento. Señalan que esta situación se agravó tras la elección presidencial del 28 de julio de 2024.
La reacción de Caracas no se hizo esperar. El canciller venezolano, Yván Gil, tachó de ridícula la decisión de Países Bajos y afirmó que la misma obedece al “eterno complejo colonial y las ganas de montar un show en redes sociales inspirados en sus complejos coloniales, de quienes han apoyado, con su doble moral, el fascimo y los intentos fracasados de desestabilizarnos”.
Atentos
El miércoles 20 de agosto el consejo de ministros de Curazao analizó la situación en la región en una reunión con el comandante de la Armada de los Países Bajos en el Caribe, Walter Hansen, y el director del Servicio Nacional de Seguridad de Curazao (VDC), Jérôme Beeldsnijder. Tras ese encuentro, Pisas declaró que los buques de Estados Unidos “son bienvenidos a abastecerse en Curazao, como es habitual, incluyendo combustible”.
Curazao forma parte del Reino de los Países Bajos, así que su política exterior y de defensa corresponde a La Haya. “La razón mencionada por el gobierno estadounidense para el despliegue de personal y recursos en esta intensificación es la lucha contra las drogas (…) Países Bajos, Estados Unidos y Curazao colaboran en la lucha contra las drogas en nuestra región”, subrayó el gobierno curazoleño.