Publicado: abril 23, 2025, 7:30 pm
La reciente actuación del grupo de rap irlandés Kneecap en el festival de Coachella ha desatado una oleada de reacciones que van más allá del ámbito musical. El trío usó el escenario como altavoz para denunciar los ataques israelíes en Gaza y criticar el papel del gobierno estadounidense en el conflicto.
Figuras como Sharon Osbourne se unieron al debate generado en redes sociales y medios de comunicación. La presentadora instó a las autoridades estadounidenses a invalidar sus visados, acusándolos de incitación al odio.
Además, argumentó que el festival comprometió su «integridad moral y espiritual» al permitir la participación de artistas que, a su juicio, promueven discursos extremistas. Por otro lado, Fox News fue aún más tajante, comparando los mensajes de Kneecap con la propaganda de la Alemania nazi y exigiendo su exclusión de los estadios estadounidenses.
Por su parte, Kneecap, lejos de retroceder, ha respondido con ironía a las críticas. En sus redes sociales, denunciaron haber recibido amenazas violentas, aunque también subrayaron que su gira por Estados Unidos para octubre ya tiene casi todas las entradas agotadas.
A pesar de la polémica, el grupo ha reforzado su presencia en el panorama internacional, posicionándose con una voz desafiante y logrando ampliar aún más sus oyentes.
