Publicado: noviembre 7, 2025, 4:30 pm
Las autoridades de Rusia y Ucrania han pactado un nuevo «alto el fuego localizado» en torno a la central nuclear de Zaporiyia, la más grande de Europa y en manos de las tropas rusas desde marzo de 2022, para permitir que continúen las reparaciones de uno de los cables de suministro externo a las instalaciones, según ha anunciado el Organismo Internacional para la EnergÃa Atómica (OIEA).
El director general del organismo, Rafael Grossi, ha afirmado que el OIEA ha mediado en estos esfuerzos, que «allanan el camino para unos trabajos de reparación destinados a reforzar la conexión de las instalaciones con la red eléctrica y evitar un accidente nuclear».
El acuerdo, que ha permitido el inicio del desminado y otros preparativos este mismo viernes cerca de la lÃnea Feroplavna-1 –cortada hace seis meses–, ha sido alcanzado dos semanas después de que se restaurara el suministro eléctrico a la central nuclear tras la reparación de uno de los cables tras un mes de apagón.
AsÃ, el organismo internacional ha afirmado que los trabajos de reparación arrancarán este sábado con la intención de reconectar la lÃnea con la central «en los próximos dÃas», lo que darÃa a la planta acceso a dos lÃneas de suministro, después de que se arreglara en octubre la lÃnea Dniprovska.
El plan inicial contemplaba arreglar ambas lÃneas de forma simultánea en octubre con dos altos el fuego localizados y temporales, si bien posteriormente se localizaron daños adicionales en la citada lÃnea en una zona más cercana a la central y fuera de las zonas pactadas para el alto el fuego, lo que retrasó que estas labores se completaran para su reconexión.
Grossi ha hecho hincapié este viernes en que las reparaciones de octubre fueron «extremadamente importantes para la seguridad nuclear», si bien ha insistido en que «claramente no es suficiente tener una lÃnea eléctrica de suministro para la central, que solÃa tener diez antes de la guerra».
«Ambas partes reconocen los riesgos que supone una pérdida prolongada de energÃa, asà como la limitada redundancia de energÃa externa en una instalación nuclear», ha argüido, antes de afirmar que Moscú y Kiev «han colaborado de forma constructiva para que estas reparaciones vitales pudieran llevarse a cabo».
«Pese a ello, la situación general de seguridad nuclear en la central nuclear de Zaporiyia sigue siendo extremadamente precaria. Solo podremos cantar victoria cuando esta devastadora guerra termine sin un accidente nuclear», ha zanjado, en referencia a la invasión de Ucrania, desatada por las tropas rusas en febrero de 2022.
Los seis reactores de la central nuclear no han generado electricidad desde hace más de tres años y están cerrados, si bien aún necesita electricidad para dar energÃa a los sistemas usados para enfriar los núcleos del reactor y el combustible utilizado para evitar un desastre nuclear que conlleve una fuga radiactiva.
