Publicado: febrero 18, 2025, 12:20 am
Alternativa para Alemania (AfD) goza de su mayor popularidad desde hace un año, con una subida de dos puntos en el último mes y medio hasta el 22% en intención de voto las elecciones legislativas del 23 de febrero. El partido de eultraderecha se situaría así como segunda fuerza por detrás del bloque democristiano de Friedrich Merz (está en el 30%).
El pasado 11 de enero, en un congreso federal celebrado Riesa, Alice Weidel fue nominada oficialmente como candidata de Alternativa para Alemania a la cancillería. Al día siguiente, el partido aprobó por unanimidad su programa electoral. En sus 177 páginas destacan promesas como el de cierre de fronteras y la «remigración», así como de salida del euro o la reintroducción del servicio militar obligatorio.
En el preámbulo del documento, AfD huye de las palabras más abruptas de anteriores propuestas (ver el programa de 2016). Ahora, de entrada todo suena conciliador y muy genérico: «En una época de desafíos globales, queremos preservar los valores fundamentales de nuestro sistema económico y desarrollarlos aún más, que podamos garantizar una sociedad libre y próspera en la que en la que los ciudadanos puedan llevar su vida de forma independiente y autodeterminada».
Inmigración y «remigración»
El programa de AfD incluye el término «remigración», acuñado por la derecha radical para referirse a la expulsión masiva de migrantes y personas con raíces extranjeras, aunque el partido sostiene que alude solo a la expulsión legal de los migrantes en situación irregular (algo parecido a lo que ya está haciendo Trump en Estados Unidos). Hasta ahora Weidel había evitado el uso de la palabra «remigración», pero ese día 12 de enero la utilizó públicamente.
Deportaciones y asilo
En esa misma línea, AfD promete el cierre de fronteras a migrantes y solicitantes de asilo, una «ofensiva de deportaciones» a gran escala de personas en situación irregular, la salida del sistema europeo de asilo y la adquisición de la nacionalidad alemana solo para hijos de padres alemanes y casos extraordinarios.
Además, contiene la prohibición de la construcción de minaretes y de usar el velo islámico en los edificios públicos. Plantean una reforma legal para poder aplicar la ley penal de adultos a jóvenes mayores de edad y, al tiempo, reducir la edad mínima de responsabilidad penal a los 12 años.
La familia alemana
Otra cuestión que evidencia las contradicciones de la candidata es el modelo de familia que defiende Alternativa para Alemania. El programa, según aprobaron los delegados al congreso, indica que la familia compuesta de «padre, madre y niños» es la célula básica de la sociedad. Weidel es madre de dos hijos junto a su mujer.
Salir del euro
AfD insiste en abandonar el euro y rechaza una unión bancaria. Sin embargo, no demanda explícitamente la salida de la Unión Europa. Lejos de transformar la UE en un «Estado federal» o de construir unos «Estados Unidos de Europa», el partido propone transformarla o reemplazarla por una «alianza de naciones europeas» con un mercado común, al que llaman «Comunidad Económica Europea renovada».
La idea es que esa Europa suponga a largo plazo una alternativa a la OTAN para la defensa del continente. Sólo abogan por un Brexit a la alemana (referéndum incluido) si sus propuestas no son consideradas en Bruselas.
Rusia y Ucrania
Alternativa para Alemania viene cargando contra la participación de Europa en la guerra en Ucrania. Defienden sus responsables que el conflicto «depende completamente de Estados Unidos». Así, el programa promete levantar las sanciones a Rusia y volver a importar gas ruso.
No obstante, los delegados del congreso de AfD en Riesa rechazaron una moción para incluir una condena a la invasión rusa de Ucrania. El partido ha sido señalado por presuntos vínculos directos con el Kremlin. Su anterior líder, Max Krah, fue acusado de recibir pagos por parte de Moscú.
Servicio militar obligatorio
El programa también lleva la reintroducción del servicio militar obligatorio. Esta propuesta fue incluida en contra de los deseos del colíder del partido Tino Chrupalla, empeñado en que Alternativa para Alemania sea un «partido de la paz».
Referéndums como en Suiza
La AfD toma a Suiza como modelo y plantea instaurar referéndums continuados. La idea que esconde es, en realidad, una merma del poder del legislativo. Cualquier ley aprobada por el parlamento sería sometida a consulta popular si se reúnen 50.000 firmas o se solicita desde ocho cantones.
Listas abiertas
La formación propone que el presidente federal (figura de caracter más bien simbólico y con pocos poderes en Alemania) sea elegido directamente por la ciudadanía. Dice AfD que así se garantizaría «un proceso más transparente e independiente de los partidos políticos». Para las elecciones proponen la «elección libre de listas» para los comicios regionales y federales, un a modo de listas abiertas.