Publicado: octubre 13, 2025, 10:30 am
Rafa Mir , cedido actualmente por el Sevilla FC en el Elche CF, compareció este lunes de manera telemática ante la titular del Juzgado de Instrucción número 8 de Llíria (Valencia) tras haber sido procesado por un delito de agresión sexual. El jugador mostró su disconformidad con esta decisión, pero anunció su renuncia a recurrir , por lo que asume que será juzgado por la Audiencia Provincial de Valencia . La defensa de Mir no presentará por tanto recursos de reforma ante la jueza instructora ni de apelación ante la Audiencia. El futbolista, que se encontraba cedido en el Valencia CF cuando sucedieron los hechos en septiembre de 2024 en su residencia de Bétera, ha comparecido por videoconferencia desde Palma de Mallorca, donde se encuentra el despacho de abogados que lo representa. En lugar de emitir una nueva declaración, Mir se remitió al testimonio que ya había ofrecido previamente y renunció a la ‘declaración indagatoria’ propia de esta fase del proceso. Su silencio obedece a la recomendación de sus letrados para evitar posibles contradicciones que puedan ser utilizadas en su contra. El auto de procesamiento dictado por la instructora es firme al concluir que existen indicios fundados, y no meras sospechas, de que se cometieron delitos graves. A Rafa Mir se le procesa por un delito de agresión sexual con acceso carnal y empleo de violencia. Concretamente, se le acusa de agredir sexualmente en dos ocasiones a una de las dos mujeres que él y su amigo Pablo Jara, también acusado, habían conocido en una discoteca de Valencia; los actos habrían ocurrido en la piscina y en un cuarto de baño de la vivienda durante la madrugada del 1 de septiembre de 2024. Para cubrir las eventuales responsabilidades civiles derivadas de una posible condena, la jueza impuso a Mir una fianza de 12.500 euros, cantidad que el jugador manifestó su disposición a transferir de inmediato. En este mismo caso, también fue procesado Pablo Jara, a quien se le imputan indicios de un delito de agresión sexual sin acceso carnal y un delito leve de lesiones contra la segunda mujer, imponiéndosele una fianza menor de 5.000 euros. De esta forma, el caso se encamina sin dilaciones hacia el juicio oral.