Publicado: mayo 4, 2025, 7:30 am
Si subimos a un vagón de metro o tren de cercanías es raro que veamos a alguien que no esté mirando la pantalla de su teléfono móvil o, en todo caso, leyendo un libro. Per esto está cambiando.
Se trata del barebacking, una nueva moda común entre los más jóvenes trabajadores surgida a raíz del final de la pandemia de coronavirus. ¿En qué consiste? En no hacer absolutamente nada cuando viajamos hacia el trabajo en transporte público.
Más en concreto, esta práctica implica viajar en trenes, autobuses y vagones de metro sin ninguna distracción digital. Es decir, nada de teléfonos, auriculares ni libros electrónicos. Ni siquiera los libros clásicos están permitidos en el barebacking.
Tal y como recoge el Daily Mail, el podcaster Curtis Morton acuñó el término en un vídeo reciente donde él y su copresentador James Hacking clasificaban los hábitos de viaje que más detestaban
Los expertos dicen que el viaje diario pospandemia ha allanado el camino para el barebacking, dejando a los viajeros solos con nada más que sus pensamientos y una realidad sin filtrar.
Amanda Augustine, coach profesional certificada en Resume.io, dice que el aumento de este comportamiento ha sido impulsado por el aumento del retorno al trabajo en la oficina. «Se espera que los empleados fichen cuando llegan a la oficina, no cuando suben al tren», dice, por lo que están «reclamando un pequeño espacio de tiempo».
Al no mirar sus teléfonos, los trabajadores pueden renunciar al trabajo realizado fuera de horario, lo que les permite recuperar su tiempo. También sostiene que esto permite a los trabajadores desintoxicarse de las pantallas, un descanso muy necesario antes y después de pasar horas frente al ordenador en sus trabajos.
«La transición de regreso a la oficina es un período desafiante para muchos viajeros», dice Augustine. «Por eso no es sorprendente que opten por usar sus viajes diarios para prepararse mentalmente para el día que les espera o para descomprimirse después del trabajo, en lugar de revisar sin pensar correos electrónicos o redes sociales», añade.
