Publicado: mayo 7, 2025, 12:30 pm
Los presidentes ruso, Vladímir Putin, y venezolano, Nicolás Maduro, firmaron este miércoles un Acuerdo de Asociación Estratégica y Cooperación al término de las negociaciones en el Kremlin, con ocasión del 80 aniversario de sus relaciones diplomáticas. La ceremonia de la firma, que contó con la presencia de las delegaciones gubernamentales de ambos países, transcurrió en la Sala Malaquita del Kremlin.
Se trata de un documento que «consolida el alto nivel alcanzado por las relaciones ruso-venezolanas y establece los principios y directrices básicas para el futuro desarrollo de la cooperación a largo plazo», según explicó la Presidencia rusa.
El portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, describió las negociaciones entre Putin y Maduro como «muy sustanciales». Además, aseguró que «abordaron todos los temas en la agenda» y destacó que la cooperación con Venezuela abarca un amplio abanico de sectores, incluido el energético.
Al inicio de la reunión con Maduro, Putin destacó que el volumen comercial (200 millones de dólares) entre ambos países aumentó un 64% en 2024 y subrayó las «buenas perspectivas» en muchos ámbitos como la energía, el transporte, la logística, sanidad y farmacéutica.
El dirigente venezolano, quien asistirá a los festejos por los 80 años de la victoria del Ejército Rojo sobre la Alemania nazi, aseguró que «el pueblo ruso y el pueblo soviético con sus héroes políticos y militares, con un sacrificio de 27 millones de seres humanos, salvaron a Europa y a la humanidad«.
Maduro también expresó su confianza en que el acuerdo de asociación estratégica y cooperación con Moscú permitirá que las relaciones «florezcan» entre Rusia, «hoy potencia principal de la humanidad», y Venezuela, «luchando en el ideal de Simón Bolívar y Hugo Chávez». En 2015 el mandatario venezolano ya asistió a los festejos de la Victoria soviética sobre el nazismo con ocasión de su 70 aniversario.
Una treintena de líderes mundiales en Moscú
Putin reúne esta semana en Moscú a una treintena de líderes de cuatro continentes para celebrar por todo lo alto la victoria del Ejército Rojo sobre la Alemania nazi. «Nos alegraremos de ver a todos los que quieran festejar con nosotros la grandiosa fecha», señalaron en el Kremlin acerca de los invitados a la parada militar en la plaza Roja, que se celebrará el 9 de mayo.
Las celebraciones contarán con una amplia presencia de dirigentes asiáticos, continente predominante en la política exterior rusa desde el inicio de la confrontación con Occidente. El principal líder asiático en asistir a los festejos será el presidente chino, Xi Jinping, cuya visita se extenderá por cuatro días e incluirá una reunión privada con Putin el 8 de mayo. También participará en las celebraciones el secretario general del Partido Comunista de Vietnam, To Lam, que recibió en enero en Hanói al primer ministro ruso, Mijaíl Mishustin.
Además, entre los invitados figuran el líder de la junta militar de Birmania, Min Aung Hlaing, y los presidentes de Laos, Thongloun Sisoulith, y Mongolia, Ukhnaa Khurelsuk. Moscú también invitó al líder palestino, Mahmud Abás, al que el Kremlin mostró su apoyo desde el comienzo de los ataques israelíes contra Gaza en octubre de 2023.
El primer ministro eslovaco, Robert Fico, será el único líder de un país de la Unión Europea que asista a los festejos en Moscú. También acudirán a la capital rusa el dirigente serbio, Alexandr Vucic, que tuvo que modificar la ruta ante el bloqueo del espacio aéreo por parte de varios países, y la líder serbobosnia, Zelka Cvijanovic. Fico y Vucic denunciaron previamente presiones y «amenazas» de la Unión Europea para no viajar a Rusia, pero optaron por hacer caso omiso a las mismas.
América Latina estará representada en las celebraciones del 9 de mayo por los dirigentes de Brasil, Venezuela y Cuba, según confirmó el Kremlin. Para el presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, que será recibido por Putin el viernes, será la primera visita en quince años. Entre los invitados especiales para observar el desfile militar en la plaza Roja también estarán veteranos de la Segunda Guerra Mundial de varios países, incluido de Estados Unidos.
Las celebraciones por los 80 años de la victoria del Ejército Rojo contarán con una gran presencia de dirigentes africanos, con los que Rusia está intentando reforzar sus relaciones por medio de la cooperación militar. En la parada estarán presentes los dirigentes de Egipto, Abdelfatah al Sisi; República de Congo, Denis Sassou Nguesso; Burkina Faso, Ibrahim Traoré; Guinea-Bisáu, Umaro Sissoco Embaló; Papúa Nueva Guinea; James Marape y Zimbabue, Emmerson Mnangagwa.
Además, habrá una nutrida representación de los países que formaron parte de la URSS y combatieron el nazismo en las filas del Ejército Rojo, como son los líderes de Armenia, Azerbaiyán y Bielorrusia, Nikól Pashinián, Ilham Aliyev y Alexandr Lukashenko. Viajarán también a Moscú los dirigentes de los cinco países centroasiáticos como Tayikistán, Emomalí Rajmón; Kazajistán, Kasim-Yomar Tokáyev; Kirguistán, Sadir Zhapárov; Uzbekistán, Shavkat Mirziyóyev y Turkmenistán, Serdar Berdimujamedov.
Los grandes ausentes
El gran ausente será el primer ministro de la India, Narendra Modi, que no puede ausentarse de su país en medio de la escalada militar con la vecina Pakistán. Putin ansiaba presidir la parada militar con Xi y Modi a su lado. Tampoco llegará a la capital rusa el conocido como «amigo de Rusia en la Unión Europea», el líder húngaro, Víktor Orban, ya que en su país no son tan bien vistas las acciones del Ejército Rojo en Europa del Este. En las gradas para los invitados de honor estarán ausentes gobernantes derrocados y exiliados en Rusia como el sirio, Bachar al Asad, y el ucraniano, Víktor Yanukóvich, informó el Kremlin.