Publicado: diciembre 3, 2025, 2:30 am
El presidente ruso, VladÃmir Putin , recibió ayer al enviado estadounidense Steve Witkoff con sendos mensajes de optimismo. Por un lado alardeó de la resiliencia de la economÃa nacional ante un grupo de importantes financieros y, por otro, se enorgulleció de los avances en el terreno militar al anunciar la conquista de la ciudad de Pokrovsk, un logro cuestionado posteriormente por la Inteligencia ucraniana . «Encantado de verle» , le saludó el jefe del Kremlin a Witkoff. Ni una mención a las tres horas que le hizo esperar mientras el mandatario intervenÃa en el foro económico. Una espera que algunos medios occidentales interpretaron como una humillación al representante de Donald Trump , que no mostró, sin embargo, signos de incomodidad. A continuación, las dos comitivas pasaron a un salón con el fin de abordar el plan de paz revisado para dotar de una solución a la guerra de Ucrania . Este informe contiene algunas modificaciones respecto al plan original de Donald Trump e incorpora condiciones y sugerencias proporcionadas por la parte ucraniana. En cualquier caso, ninguno de los implicados entiende que es un documento final, sino en todo caso un posible «punto de partida» de futuras negociaciones. Witkoff estuvo acompañado por Jared Kushner, asesor de exteriores y yerno del presidente estadounidense. Putin se sentó junto a su consejero de asuntos internacionales, Yuri Ushakov, y el asesor presidencial Kiril DmÃtriev, director del fondo de inversiones ruso. Dmitriev se reunió recientemente en Florida con Witkoff y el secretario de Estado Marco Rubio para avanzar en el documento. Finalmente el encuentro duró cinco horas, finalizando a las 00:30, hora de Moscú. Algunas fuentes consideraban que la duración del encuentro podrÃa ser positiva y que las dos delegaciones habÃan entrado a fondo en una discusión de su apartados. La Administración de Trump no espera un resultado concluyente, pero sà aspira a que el plan sea aceptado por Putin como el punto de apoyo desde el que construir un proceso de paz. El asesor del presidente ruso Yuri Ushakov al salir de la reunión la tildó de «útil, constructiva y muy sustancial» . Él mismo después del largo encuentro relató a la prensa que se discutieron a fondo la solución en Ucrania. Las posturas entre Washington y Moscú no se han alejado, y el consultor señaló que durante la reunión «no se abordaron las formulaciones especÃficas del plan de paz estadounidense; se discutió la esencia». La sintonÃa entre ambas delegaciones fue buena aunque el mismo Ushakov remarcó que «algunas propuestas estadounidenses son inaceptables» , sin concretar cuáles. Además del plan de paz también tuvieron tiempo de discutir sobre el futuro de la cooperación económica entre EE.UU. y Rusia e incluso sobre una repetición de un nuevo encuentro entre Putin y Trump. A pesar de estas buenas palabras, por ahora el acuerdo de paz necesitará más trabajo de los cuerpos diplomáticos para que este cuente con el beneplácito de ambas partes. Justo antes del encuentro, VladÃmir Putin compareció en el foro económico del banco VTB ‘Rusia Llama’. Desde el atril de este evento, el mandatario eslavo tocó muchos temas de actualidad y diferentes mensajes dirigidos a sus vecinos del continente. Uno, en especial, lo envió a los lÃderes europeos, a quienes advirtió que Moscú no tiene planes de entrar en guerra con la UE pero «si Europa de repente quiere luchar contra nosotros y empieza, (Rusia) está lista ahora mismo». Se trata de un mensaje que el jefe del Kremlin ha lanzado en anteriores ocasiones en las últimas semanas en paralelo a la reiteración, por parte de diferentes dirigentes comunitarios, de que el Kremlin se estarÃa planteando un conflicto armado en el futuro con miembros del bloque. Putin se mostró molesto con estas declaraciones pero también con las iniciativas europeas que, según el, entorpecen las negociaciones sobre la normalización de Ucrania. «Ellos no tienen una agenda de paz, están del lado de la guerra» criticó a los dirigentes continentales. Desde el Kremlin ven «claramente« un deseo expreso de »bloquear el proceso de paz». El presidente sostuvo que nadie ha expulsado de las negociaciones de paz a la UE. «Ellos están ofendidos. Pero quiero señalar que nadie los suspendió, ellos mismos se retiraron» aseguró. La estrategia de Bruselas respecto al conflicto en estos años ha buscado responder a Rusia y sancionarla, además de apoyar económicamente y militarmente a Ucrania, algo que ha molestado sobremanera a Moscú, que rechaza igualmente las exigencias de la UE para la paz; entre ellas, que no se cambien las fronteras de Ucrania «por la fuerza» y que este paÃs pueda conservar un ejército lo suficientemente amplio para garantizar su seguridad futura. Putin reiteró que las «propuestas presentadas por Europa como parte del plan de paz son inaceptables». Desde su punto de vista, los paÃses occidentales «quieren eliminar a los competidores, mantener sus antiguos privilegios en un mundo en rápido cambio, ese monopolio que se les escapa». Sin embargo, a pesar de sus palabras, la realidad es que el paÃs euroasiático se ha visto debilitado tras casi cuatro años de guerra, y ha perdido influencia en Oriente Medio, Cáucaso y Asia Central. Además podrÃa perder pronto a la Venezuela de Nicolás Maduro. Putin también mencionó que su paÃs siente «presión externa». «Sin embargo, la economÃa está haciendo frente con éxito a estos desafÃos» matizó con orgullo ante los representantes financieros. Agregó que su deuda pública es de las más bajas del mundo, inferior al 20% del PIB. A pesar de estas palabras, la economÃa rusa ha sufrido vaivenes y las autoridades se han visto obligadas recientemente a subir impuestos tanto a la renta como por el valor añadido.
