Publicado: junio 4, 2025, 2:34 pm
El economista Asdrúbal Oliveros, socio-director de Ecoanalítica, advirtió sobre la persistencia de problemas estructurales en la economía venezolana, exacerbados por factores coyunturales recientes, que impactan directamente en la inflación y el mercado cambiario.
Por: Unión Radio
«El problema estructural del tipo de cambio no se ha resuelto, y es principalmente que hay un nivel de gastos del Estado que está muy por encima de sus ingresos», señaló Oliveros en entrevista con Román Lozinski, explicando que esta situación genera un exceso de bolívares en el sistema que, ante la incertidumbre, se traduce en presión sobre el mercado de divisas. «Si no tengo al Banco Central como oferente o un mercado donde empresas y ciudadanos puedan acceder legalmente a las divisas, al no haber suficiente cantidad, obviamente se manifiesta en subida de precio», añadió.
A esta situación estructural se suma la suspensión de licencias petroleras, lo que ha reducido significativamente la oferta de dólares en el mercado. «Las empresas petroleras aportaban alrededor del 40% de los dólares que se subastaban en el mercado», explicó Oliveros, quien señaló que, aunque PDVSA está asumiendo algunas de estas operaciones, la necesidad de vender petróleo con descuentos en Asia afecta negativamente la disponibilidad de divisas.
El economista alertó sobre una aceleración inflacionaria. «Los cálculos independientes sugieren una aceleración importante de los precios en Venezuela».
Para Oliveros, existen medidas que podrían aliviar la situación, incentivando la movilización de los dólares que ya circulan en el país. «Probablemente puedo suspender el IGT, puedo reducir las comisiones para que se depositen esos dólares por la banca, elimino comisiones por transferencia», propuso, enfatizando la necesidad de voluntad política para implementar estas acciones.
En cuanto a la fijación de precios en el comercio, Oliveros recordó que «los comerciantes pueden fijar los precios de las tasas de cualquier moneda que publica el Banco de Venezuela… siempre que por supuesto haga vigencia a la tasa del Banco de Venezuela». También instó a los comerciantes a reflejar correctamente su estructura de costos en la moneda utilizada para fijar precios, evitando prácticas confusas y contrarias a la normativa.
Oliveros se refirió a la posibilidad de establecer precios clave para alimentos y medicinas, aunque descartó un control estricto como el implementado en el pasado, el cual, según él, solo fue sostenible gracias a los «flujos de ingresos enormes» de la época.
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