Publicado: agosto 15, 2025, 7:30 pm
La ONG Provea consideró este viernes como una «nueva amenaza» contra los sindicatos que el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, planteara el inicio de un proceso constituyente para «trascender» de las «estructuras burocráticas del sindicalismo» y construir «nuevos y poderosos movimientos».
En X, Provea rechazó las declaraciones del mandatario, quien concretamente planteó el proceso constituyente tras considerar al «sindicalismo tradicional» como «envejecido» y «agotado».
«Creo que hay llegado el momento de que el gran movimiento de los trabajadores y trabajadoras de Venezuela arranque un proceso constituyente para trascender (de) las estructuras burocráticas del sindicalismo tradicional, envejecido, agotado, y vayamos a la construcción de nuevos y poderosos movimientos», expresó Maduro el jueves, en un acto transmitido en su canal de YouTube.
Provea advirtió que, «en medio del ascenso de las protestas por derechos laborales y en medio de la extinción del Estado de Derecho, la respuesta estatal ha sido la represión contra los trabajadores, los sindicatos y los gremios».
«Esta nueva amenaza se produce en el marco de la imposición de un modelo económico basado en el estrangulamiento de la capacidad de consumo de los trabajadores, la precarización del empleo decente, la flexibilización de las relaciones de trabajo y la persecución a la disidencia laboral», subrayó la ONG.
Asimismo, afirmó que, cuando Maduro asumió la Presidencia en 2013, «inició la progresiva anulación de derechos laborales» y, en diez años de Gobierno, «decenas de dirigentes sindicales han sido detenidos y procesados» y se han registrado «más de 3.000 casos de amenazas u hostigamiento», según un informe propio que citó de 2023.
Para el coordinador general de Provea, Oscar Murillo, la «nueva amenaza de Maduro contra la libertad sindical no es un hecho aislado», sino «el largo historial de hostigamiento contra trabajadores y líderes laborales (que) evidencia una sistemática práctica que busca acallar el disenso social e imponer una ‘verdad’ oficial».
Provea subrayó que la existencia del sindicalismo autónomo, «libre de amenazas e injerencias indebidas del Estado», es «esencial para la democracia y la garantía de los derechos sociales». EFE