Tras la última, y enésima, acción de represalia de la aviación israelí contra objetivos en Yemen -a raíz del estallido de un misil balístico hutí en Tel Aviv-, el propio Netanyahu ha tenido que conceder que este ha sido solo un capítulo más de un enfrentamiento que llevará tiempo solucionar. En el último año, los rebeldes yemeníes -pertenecientes a una tribu chií, apoyada por Irán – han lanzado dos centenares de misiles y otros tantos drones contra Israel, y no parecen asustados por las represalias de las Fuerzas Aéreas judías. Solo una intervención terrestre contra las regiones de Yemen en manos hutíes, entre ellas la capital Saná y varios puertos, podría apagar ese foco de conflicto. Pero Yemen está demasiado… Ver Más