¿Playas limpias y con acceso público? - Venezuela
Registro  /  Login

Otro sitio más de Gerente.com


¿Playas limpias y con acceso público?

Publicado: abril 23, 2025, 7:00 am

Las playas de México y el mundo son uno de los sitios preferidos para descansar y alejarse temporalmente de lo cotidiano. Al menos eso pensamos quienes vivimos en ciudades y que, a la menor provocación, abarrotamos las playas.

La historia nos dice que no siempre fue así. Antes, los mares y las costas eran percibidos como sitios peligrosos, asociados a desgracias y naufragios e incluso refugio de monstruos acechantes.

El cambio se dio a finales del siglo XVIII. Ahí se inició la nueva tendencia en la salud con baños de mar, sales y algas (talasoterapia) para atender distintos males que aquejaban a la población europea.

A partir de entonces y con una muy acentuada influencia de la publicidad que convirtió a las playas en símbolo del placer, hoy son íconos de descanso y esparcimiento, y desafortunadamente también, receptoras de las peores prácticas humanas asociadas principalmente al turismo: de los que construyen en ellas y también de los que viajan a ellas.

Y es que los sitios más bellos del mundo han vivido la maldición de su belleza; cada año atraen a millones de personas y con ello a desenfrenados inversionistas que, sin recato, se apoderan de estos sitios para extraer el máximo beneficio en la menor cantidad de tiempo, sin importar que a los pocos años los dejen hechos un despojo de destrucción y deterioro.

Así está sucediendo en Baja California Sur, en Nayarit, Jalisco, Quintana Roo y Yucatán. Una invasión del turismo más voraz, donde el acceso a las playas ha quedado sólo para el que paga, donde los residuos y descargas son dejados o liberados en los sitios que, paradójicamente, por su playa limpia, el aire puro, el agua fresca y el paisaje intacto, generaron su atractivo.

Y aunque el turismo mal llevado es la principal causa de deterioro de las playas, hay otras fuentes de deterioro que provienen de tierra adentro: descargas de aguas residuales a través de cauces de ríos y arroyos, residuos arrastrados por esos mismos ríos o plásticos traídos por las corrientes marinas de lo que arrojan los barcos, muchos de ellos también cruceros de turistas.

Se estima que, a nivel global, se arrojan al mar 13 millones de toneladas de plástico cada año, es decir, el equivalente a ¡un camión de basura que vacía su carga en el océano cada minuto!

¿Qué hacer? Primero, dejar de generar tanta basura, y eso, principalmente eliminando de nuestras vidas los productos de plásticos de un solo uso. Esa sola acción haría una gran diferencia. Tanta como que las especies marinas y todas las aves dejarían de tener en su sistema digestivo restos de plásticos y que las y los niños no fuesen la principal tendencia en aumento de casos de cáncer por el ingreso de altos contenidos de microplásticos en su organismo, junto con una larga lista de elementos tóxicos que se adhieren a ellos.

No es difícil asumir esa actitud, el plástico de un solo uso es un exceso en la búsqueda de confort, que puede eliminarse de nuestras vidas. ¿No cree que valdría la pena intentarlo?

* La autora es subsecretaria de Biodiversidad y Restauración Ambiental, de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales del Gobierno de México

Related Articles