Picaduras en la playa: medusa, pez araña y carabela portuguesa - Venezuela
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Picaduras en la playa: medusa, pez araña y carabela portuguesa

Publicado: junio 3, 2025, 7:00 am

Ir a la playa es sinónimo de verano, chapuzones y juegos en la arena. Pero también puede haber sorpresas menos agradables… Algunas especies marinas pueden provocar picaduras bastante molestas e incluso dolorosas. Conocerlas, saber cómo actuar y desterrar algunos mitos muy extendidos puede marcar la diferencia entre un verano tranquilo o una pesadilla en la orilla del mar.

Hoy en el blog repasamos las tres picaduras más frecuentes en las costas de España: las medusas, el pez araña y la carabela portuguesa.

Picadura de medusa

Las medusas tienen unos tentáculos llenos de células urticantes (cnidocitos) que, al entrar en contacto con la piel, liberan una sustancia irritante. No es necesario tocarlas directamente: a veces incluso el roce con fragmentos invisibles en el agua puede provocar una reacción.

Tras ese contacto con una medusa aparece dolor punzante o escozor de manera inmediata, mientras que en la piel observaremos enrojecimiento, inflamación y la aparición de ronchas o habones lineales. En muchos casos, sobre todo si no se actúa a tiempo, el picor o sensación de quemazón puede durar varias horas.

Si tienes la mala suerte de cruzarte con una medusa, estos son los consejos que debes poner en práctica:

  • Sal del agua de inmediato.
  • Lava la zona con agua salada (nunca dulce, ya que puede activar más cnidocitos).
  • Retira tentáculos visibles con pinzas o con una tarjeta (usa guantes o un objeto rígido, nunca las manos desnudas).
  • Aplica frío local (como hielo envuelto en un paño, 10-15 minutos).
  • Si el dolor es intenso, puede administrarse un analgésico o un antihistamínico vía oral.

Y no, en esta lista no está incluido que la orina vaya bien para las picaduras de medusas. De hecho, no se neutraliza el veneno e incluso puede empeorar la situación debido a su carácter irritante.

Picadura de pez araña

Este pequeño pez vive semienterrado en la arena, especialmente en aguas poco profundas. Como podéis observar en la foto de arriba, tiene espinas en la aleta dorsal conectadas a una glándula venenosa, las cuales, al pisarlo sin querer, liberan el veneno.

En este caso aparece un dolor muy intenso y punzante de forma súbita en un pie (a veces en la mano), que puede irradiarse por toda la pierna o brazo. También puede aparecer inflamación, enrojecimiento e incluso dificultad para mover la extremidad afectada.

Es importante seguir estos consejos para hacer desaparecer el dolor, ya que, a diferencia de las medusas, contamos con un remedio que consigue neutralizar el veneno.

  • Sal del agua y limpia la zona con agua salada.
  • Sumerge la zona afectada en agua caliente (no hirviendo, pero sí lo más caliente que se tolere, unos 40–45 °C) durante al menos 30 minutos. El calor desactiva el veneno.
  • Si el dolor persiste, puedes tomar un analgésico.

Picadura de carabela portuguesa

Aunque parece una medusa, en realidad es una colonia de organismos. Tiene tentáculos muy largos, a veces de más de 10 metros, y extremadamente urticantes. Flota sobre la superficie del agua y es arrastrada fácilmente por el viento. Dependiendo de la región del mundo en donde te encuentres se la conoce como carabela portuguesa o aguas malas.

Su «picadura» produce un dolor muy intenso al instante, parecido a una quemadura, con marcas lineales en la piel. Puede acompañarse de náuseas, mareo, dificultad para respirar o incluso una reacción general grave (anafilaxia), aunque esta última es poco habitual.

Como en los casos anteriores debemos actuar con rapidez para conseguir que sea la lesión sea lo menos extendida posible:

  • Sal del agua con cuidado (los tentáculos pueden seguir pegados).
  • Lava con agua salada.
  • No frotes ni con toallas ni con arena.
  • Retira tentáculos con guantes o una tarjeta rígida.
  • Aplica frío local para aliviar el dolor.
  • Debido a que las lesiones suelen ser graves, se recomienda buscar atención médica lo antes posible.

Por último, es aconsejable poner en marcha una serie de consejos que harán menos probable una picadura de estos seres marino y que todos deberíamos tener en cuenta:

  • Infórmate sobre el estado del mar antes de bañarte (banderas, avisos de medusas…).
  • Usa escarpines o cangrejeras si estás en una zona de pez araña.
  • Enseña a los niños a no tocar animales marinos, aunque estén muertos en la orilla.
  • Lleva siempre una botellita de suero fisiológico o agua salada y una tarjeta rígida (como una de crédito).
  • No apliques vinagre, alcohol, orina o pomadas caseras: pueden empeorar la lesión.
  • En el caso de que tengas dudas, acude al puesto de socorro a hablar con con los vigilantes de la playa.

En cualquier caso, parece razonable que si con los consejos que te hemos contado o si una primera atención en el puesto de socorro no es suficiente para mitigar el dolor o el picor de algunos de estos animales, debemos acudir al médico para que valore la situación y nos recomiendo el mejor tratamiento posible.

En resumen…

Las picaduras marinas son más frecuentes de lo que parece, pero con información, calma y una buena actuación, la mayoría se resuelven sin mayores problemas. En cualquier caso, disfruta del mar, pero siempre con un poco de cabeza y sentido común.

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