Publicado: septiembre 7, 2025, 10:30 am
El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, ha afirmado este domingo que está dispuesto a asumir el «daño» a la imagen internacional de Israel con tal de lograr la «victoria» en la guerra de Gaza. «Respecto al daño propagandístico, quiero decir algo: si tengo que elegir entre la victoria sobre nuestros enemigos y la mala propaganda contra nosotros, prefiero la victoria sobre nuestros enemigos, y no lo contrario», afirmó durante una reunión del Gobierno, en declaraciones compartidas por su oficina.
«Soy consciente del precio que estamos pagando en el ámbito diplomático y propagandístico para el Estado de Israel», reconoció, antes de subrayar que la mejor salida pasa por «establecer mecanismos completamente nuevos» y «poner fin a la guerra lo antes posible, con la victoria que definimos». Netanyahu detalló que ese objetivo significa «eliminar a Hamás, devolver a todos los rehenes y garantizar que Gaza no represente una amenaza para Israel».
Sus declaraciones se producen en plena ofensiva del Ejército israelí contra la ciudad de Gaza, la capital de la Franja, donde hasta hace dos semanas se refugiaban cerca de un millón de palestinos, muchos de ellos ya desplazados de otros lugares del enclave.
Según la Oficina para la Coordinación de Asuntos Humanitarios de la ONU (OCHA), desde el 14 de agosto casi 41.000 personas, la mayoría de la ciudad de Gaza, han huido hacia el sur del enclave, a donde Israel pretende desplazar a la población de la ciudad.
Netanyahu afirmó que más de 100.000 gazatíes han abandonado ya la localidad, sin aportar pruebas, y dijo que el Ejército está acabando con «líderes terroristas críticos» en la ciudad de Gaza, que definió como el «último bastión importante» de Hamás.