Publicado: abril 30, 2025, 8:30 pm
Un exguardia del campo de concentración nazi de Sachsenhausen, acusado de ser cómplice de al menos 3.322 muertes, ha muerto a los 100 años de edad, según ha informado este miércoles la Fiscalía de Gießen y la Audiencia Provincial de Hanau, por lo que ya no podrá ser juzgado.
Según el certificado de defunción remitido a la Audiencia Provincial, el acusado murió el pasado 2 de abril, antes de que el tribunal pudiera tomar una decisión sobre el inicio del juicio. «El por nosotros acusado ante la Audiencia Provincial de Hanau ha muerto», ha declarado un portavoz de la Fiscalía. El juzgado también ha confirmado el fallecimiento.
Los peritos estaban en proceso de determinar si el hombre estaba en plenas facultades para poder enfrentarse a un juicio, justo cuando el tribunal recibió el certificado de defunción. En agosto de 2023, la Fiscalía lo había acusado de haber sido cómplice, en el desempeño de su cargo de guardia del campo de concentración de Sachsenhausen, al norte de Berlín, del asesinato de al menos 3.322 prisioneros.
Un guardia encargado de cientos de prisioneros
Según la acusación, el hombre había custodiado a los prisioneros como miembro del batallón ‘Totenkopf’ de las SS y también se le había encomendado la vigilancia de los transportes de prisioneros y su traslado desde la estación de ferrocarril hacia el campo principal.
Sin embargo, el proceso judicial quedó estancado después de que la Audiencia Provincial de Hanau se negara a admitir la acusación en mayo de 2024 por el estado de salud del acusado, de entonces de 99 años. Finalmente, la decisión fue recurrida con éxito por la Fiscalía, por lo que se retomó el caso. El juicio, de haberse celebrado, habría tenido lugar en la sala penal de menores de la Audiencia de Hanau, ya que en el momento de los hechos, este tenía 19 años -era menor en términos de responsabilidad penal-.
El tribunal ha calificado la muerte del acusado de «impedimento procesal no solventable» que conllevará a la decisión por parte de la sala correspondiente de la no apertura del juicio. En 2022 otro exguardia de Sachsenhausen, de entonces 101 años, fue condenado a cinco años de prisión por complicidad en 3.500 asesinatos.
Ese mismo año una antigua secretaria del campo de concentración de Stutthof fue condenada a dos años de cárcel por complicidad en 10.505 casos de asesinato.
