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Miguel, el hijo del torero Palomo Linares, deberá declarar ante el juez acusado de maltrato animal

Publicado: marzo 12, 2025, 9:30 pm

El empresario Miguel Palomo Danko, hijo del torero Palomo Linares y de Marina Danko, deberá declarar ante la justicia tras ser acusado por un presunto delito de maltrato animal. Fue su expareja, Paula Sánchez Zurdo, quien ha presentado la acusación formal ante la justicia.

Será el próximo 25 de abril cuando Palomo deberá acudir a los juzgados para declarar su versión de los hechos como investigado. Su hermano mayor, Sebastián, tendrá que ir también a la citación judicial.

Según El Español, los hermanos tendrán que presentarse en el Juzgado de Instrucción número 4 de Illescas para ofrecer su versión de los hechos.

Paula Sánchez Zurdo, la denunciante, asegura que tuvo que rescatar a la perra de Miguel, llamada Bronca, cuando se percató de las condiciones en las que vivía en la Finca ‘El Palomar’.

Poco después, el animal perdía la vida presuntamente a causa de las secuelas. Es la versión que ha ofrecido la denunciante en sus redes sociales pero que ha servido para imputar a los dueños del animal.

«Quiero expresar mi más sincero agradecimiento a mis abogados, quienes han demostrado un compromiso inquebrantable en la defensa de nuestros derechos».

«Lucharemos incansablemente para lograr una sentencia ejemplar y concienciar sobre la gravedad del maltrato animal», añade Paula Sánchez. La denunciante también ha compartido su descontento con Miguel tras asegurar que se siente libre de toda responsabilidad respecto a Bronca.

«Bronca no era solo un animal, era un ser lleno de amor, lealtad y ternura. ¿Cómo puede hablar de ella con semejante desprecio? Puedo decir con el corazón en la mano que Bronca era lo más bondadoso, cariñosa, agradecida y buena. A pesar de todo el daño que sufrió, al menos pudo vivir feliz conmigo después de rescatarla, conociendo el amor y la seguridad que él le negó», ha escrito.

«Es indignante que se lave las manos como si su abandono no hubiera tenido consecuencias. La responsabilidad era suya», concluye Paula.

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