Publicado: enero 22, 2025, 5:00 am
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El reciente informe Latinobarómetro 2024 revela un dato histórico: por primera vez desde 1995, al menos la mitad de los mexicanos se declara satisfecha con el funcionamiento de la democracia en el país. Este estudio, realizado anualmente desde hace 30 años por la ONG Corporación Latinobarómetro con sede en Santiago de Chile, analiza la opinión pública sobre la democracia en 18 países de América Latina a través de encuestas representativas.
Los resultados muestran que el 50% de la población mexicana está satisfecha con la democracia; el porcentaje más alto registrado en la historia del estudio en el país. Con esta cifra, México se posiciona como el tercer país más satisfecho de Latinoamérica, solo por detrás de Uruguay y El Salvador.
Otros datos relevantes del Latinobarómetro 2024 son los siguientes:
- El 49% de los mexicanos afirma que «la democracia es preferible a cualquier otra forma de gobierno», un aumento significativo comparado con el 35% registrado en 2023.
- Solo el 24% de los encuestados apoyaría un gobierno autoritario, una disminución considerable respecto al 33% del año anterior.
Estos resultados invitan a la reflexión: ¿qué factores explican este aumento en la satisfacción con la democracia? ¿Reflejan un cambio profundo en la sociedad mexicana o se deben a circunstancias coyunturales? ¿Qué tipo de democracia prefieren los mexicanos?
El auge de la «democracia popular»
Una posible explicación es que la sociedad mexicana se identifica cada vez más con un modelo de «democracia popular», caracterizado por:
- Mecanismos de democracia participativa: la implementación de consultas populares y la promoción de la participación ciudadana en la toma de decisiones podrían estar fortaleciendo la conexión entre el gobierno y la población.
- Equidad económica: las políticas públicas enfocadas en reducir la desigualdad y mejorar las condiciones de vida de los sectores más vulnerables podrían estar generando un mayor sentido de justicia social.
En contraste, los datos sugieren que la sociedad mexicana no se siente cómoda con
- Instituciones complejas y elitistas: reformas que dificultan la comprensión del sistema político o que favorecen los intereses de grupos privilegiados generan desconfianza y rechazo.
- Concentración del poder: la percepción de que el poder se concentra en élites políticas, económicas o judiciales socava la legitimidad del sistema democrático.
El papel de las instituciones electorales
Si bien el Latinobarómetro no profundiza en este aspecto, es importante preguntarse qué papel han jugado el INE y el TEPJF en este proceso. ¿Han contribuido a fortalecer la confianza ciudadana en el sistema electoral? ¿Han logrado garantizar la transparencia y la equidad en los procesos electorales? ¿Ha mejorado en los últimos tiempos la labor de las autoridades electorales?
Estas preguntas ameritan una investigación más profunda. Sin embargo, es innegable que en 2024 el proceso electoral más grande de la historia de México resultó en una mayor satisfacción ciudadana con la democracia electoral. Esta percepción es fundamental, ya que se relaciona tanto con la legitimidad social del sistema como con la confianza ciudadana en las instituciones encargadas de los mecanismos democráticos.
El aumento en la satisfacción con la democracia en México es una noticia alentadora. No obstante, es importante mantener una perspectiva crítica y reconocer los desafíos que aún persisten, particularmente en términos de democracia inclusiva.
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