Publicado: julio 3, 2025, 2:00 am
México es el receptor que más perderá, en términos absolutos, con la aplicación del impuesto a las remesas enviadas desde Estados Unidos, aún con la tasa gravable en 1%, estimaron expertos del think tank Center for Global Development, con sede en Washington.
Según sus estimaciones, incluso con la tasa gravable de 1% sobre los envíos de remesas se reducirán las transferencias a través de canales formales y los hogares mexicanos que por más de dos décadas han sido beneficiados, se verán afectados.
Al interior del análisis titulado “Aún en 1%, el impuesto a las remesas golpeará fuerte a los países pobres”, estimaron que su aplicación restará 1,500 millones de dólares anuales al flujo de estos ingresos.
Citaron una investigación de Amir Imam del 2022, que encontró que por cada aumento de 1% en el costo de envío, el monto enviado disminuye en aproximadamente 1.6 por ciento.
Según el análisis, liderado por Helen Dempster; Charley Ward y Sam Husckstep, aunque sea mínima la tasa se desviará al pago del impuesto y desincentivará gradualmente las transferencias.
En la investigación señalaron que después de México, los hogares receptores de India, China y Vietnam serán los más afectados y mucho después se ubican los centroamericanos como Guatemala, República Dominicana y El Salvador.
El responsable de la Dirección de Estadísticas Económicas y el Foro de Remesas de América Latina del Centro, Centro de Estudios Monetarios de Latinoamérica (Cemla), Jesús González Cervantes, ya había explicado que es el volumen absoluto de los mexicanos en Estados Unidos lo que multiplica el impacto de este gravamen en sus envíos.
Centroamérica, comprometida
en proporción del PIB
En el análisis explicaron que los países centroamericanos sufrirán la mayor pérdida de ingreso respecto del PIB nacional con un impacto importante en ingresos familiares, menor demanda de los consumidores y mayores presiones cambiarias.
Para El Salvador anticipan que perderá el equivalente a 0.6% del PIB como resultado del impacto del impuesto a las remesas sobre los flujos dirigidos al país: Honduras registrará una caída de 0.5% en porcentaje del PIB en sus ingresos y México 0.1% del Producto.
Esta proporción está vinculada con el peso que tienen las remesas en la riqueza nacional, que en el caso de México representan 3.9% del PIB mientras para El Salvador, significan 24.1% de su PIB.
Mayor base gravable
En el análisis refieren que el impuesto original aprobado por la Cámara de representantes, de 3.5% sobre los envíos, debía generar 26,000 millones de dólares en 10 años.
En ese momento sólo se cobraría a todos los emisores de remesas, pero se tenía contemplada la opción de una devolución a los migrantes emisores con ciudadanía.
El Senado de Estados Unidos redujo a 1% la tasa gravable y ahora aplica a todos los emisores de remesas, lo que les dejará una rentabilidad de 10,000 millones de dólares si es que no hubiera cambio en los envíos.
Sin embargo, considerando que el gravamen de 1% reduciría en 1.6% los envíos, los expertos del think tank estiman que la rentabilidad sería de 4,600 millones de dólares.