Publicado: octubre 27, 2025, 11:00 am
La líder opositora María Corina Machado planteó este lunes una propuesta económica sin precedentes: una privatización radical para desmontar de raíz el modelo socialista impuesto por Nicolás Maduro y reconstruir el aparato productivo destruido durante los últimos 25 años.
Por lapatilla.com
Participando de forma virtual en el evento “La lucha de Venezuela por la libertad”, organizado por Fortune, Machado, hoy en clandestinidad para evitar la persecución del régimen, aseguró que el país está frente a la mayor oportunidad económica de la región.
“Venezuela será la mayor oportunidad económica en las próximas décadas en esta región. Estamos hablando de una oportunidad de negocio de más de 1,7 billones de dólares. Esto es único”, afirmó.
La dirigente liberal recordó que Venezuela pasó de ser “el país más rico y libre de Latinoamérica a uno de los más pobres del mundo”. Señaló que la combinación de estatización, represión y corrupción ha paralizado industrias, derrumbado la infraestructura y expulsado a casi un tercio de la población.
“Nuestra economía se ha derrumbado. Ha caído más del 80% en los últimos años. Nuestra gente se ha visto obligada a huir simplemente para sobrevivir”, sentenció.
Machado advirtió que el país se ha convertido en un “estado narcoterrorista”, que financia su permanencia en el poder mediante oro contrabandeado, tráfico de armas, drogas y explotación humana.
El corazón de su plan económico consiste en devolver a manos privadas las más de 500 empresas que, según dijo, fueron confiscadas y destruidas por el chavismo, pero cuya infraestructura aún puede rescatarse.
Machado se comprometió a impulsar mercados abiertos, estabilidad jurídica, incentivos fiscales y una lucha frontal contra la corrupción:
“Venezuela hoy ocupa el último lugar del mundo en Estado de derecho. Eso va a cambiar desde el primer día”.
La líder de Vente Venezuela subrayó que el país, a pesar de tener las mayores reservas de petróleo del mundo y una de las más grandes de gas, ni siquiera puede abastecer a su gente para cocinar.
Recordó que miles de familias han tenido que cocinar con leña o quemar muebles tras la destrucción del sistema de distribución de gas doméstico.
La recuperación energética, explicó, sólo será posible con inversión internacional y con el retorno del talento venezolano expulsado por la crisis.
“Nuestra diáspora está lista para volver cuando Venezuela se ponga a trabajar arduamente”.
