Publicado: mayo 15, 2025, 12:30 pm
Este jueves, Manuel ha zanjado cualquier especulación sobre la situación que atraviesa con su entorno más cercano. Tras su expulsión de Supervivientes, el joven ha hablado con TardeAR y ha confirmado que la relación con su familia está completamente deteriorada. «No estoy bien ni con mi hermana ni con mi padre», ha asegurado.
El detonante tiene nombre propio: Gabriella. Su clan no mantiene una buena relación con ella, y durante su estancia en el reality, su figura ha sido motivo recurrente de controversia en televisión. Las supuestas infidelidades habrían alimentado el malestar entre los suyos, una tensión que acabó estallando durante la gala de Tierra de nadie del martes, cuando su padre y su hermana abandonaron el plató.
Ahora, ya fuera del concurso, Manuel ha querido aclarar cómo se encuentra y cómo afronta esta situación. «No estoy en buen momento, no duermo», ha reconocido. Y ha sido aún más directo al referirse al distanciamiento con sus más allegados: «La mierda no hay que moverla mucho. Si se mueve mucho, apesta».
En paralelo, ha querido reforzar públicamente su apoyo a Gabriella. Lo ha hecho desde el exterior del set de Los vecinos de la casa de al lado, donde se encuentra ella actualmente, gritándole: «¡Confío en ti!».
La opinión del padre
También el padre de Manuel ha ofrecido su versión a TardeAR. Al ser preguntado por el supuesto veto que le habría impuesto su hijo en los platós, ha respondido: «El que tiene que ganar dinero es él, yo no voy a ir a ningún lado más. Se lo preguntas a mi hijo y mi hija». Sobre su relación actual con su descendiente, se ha limitado a decir: «Ya no cuenta nada más, no quiero saber nada más».
