Publicado: marzo 31, 2025, 2:30 am
Son las once de la mañana. Es plena semana de Ramadán y Tánger funciona a medio gas. Por la calle, la gente camina despacio, hay que guardar fuerzas hasta que caiga el sol y puedan ingerir la primera comida del dÃa. Los que no saben si comerán o no son los niños de la calle. Tampoco parece importarles mucho, su preocupación es otra: comprar el pegamento que después esnifan para olvidarse de todo. Cuando el sol ya comienza a apretar, estos niños salen de su escondite. Ocultos en un desagüe en el parque Moulay Ibrahim, una decena de menores viven entre la basura. Suben y bajan del desagüe con cartones que usarán en otro lugar por si tienen que ponerse… Ver Más