Publicado: abril 15, 2025, 1:00 pm
La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha advertido que los españoles comen peor que hace 10 años, y ha mostrado su preocupación por la «excesiva ingesta» de platos preparados ricos en sal, azúcar o grasas saturadas, superando su consumo un 90% de la frecuencia aconsejable.
El organismo ha realizado así un análisis a partir de la evolución del Panel de consumo de alimentos publicado por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, descubriendo un aumento del consumo de platos preparados ultraprocesados como pizzas, empanadillas o croquetas, además del incremento del 140% del consumo recomendado de grasas untables, como la margarina o la mantequilla.
El consumo superior al recomendado ha crecido también en un 240% en el caso de los refrescos, zumos y otras bebidas envasadas como la cerveza sin alcohol, así como en la carne roja. Otros grupos que son consumidos «en exceso» son las carnes preparadas, como los embutidos o las salchichas, que se ha visto incrementado en un 149%.
Cabe destacar que otros productos, como el aceite de oliva son consumidos un 43% menos de lo recomendado, una tendencia que siguen alimentos como las leches fermentadas (72% menos de lo recomendado), los panes integrales (94% menos), los quesos (47% menos), los frutos secos (67% menos), las hortalizas frescas (55% menos), los huevos (62% menos), las legumbres (87% menos), la pasta (62% menos), el arroz (66% menos), o el pescado (64% menos).
Entre otros alimentos que son consumidos en exceso se encuentran las bebidas alcohólicas (un 51% más de lo recomendado), los dulces (un 71% más) y la sal (un 75% más).
Exceso de peso en la Población
Todos estos datos son un reflejo del aumento del 6% de las personas con exceso de peso desde 2014, llegando ya al 56%, y que han influido igualmente en el incremento de la prevalencia de aquellas enfermedades relacionadas con los malos hábitos alimentarios, como la hipertensión arterial, que se sitúa en el 21,4%, o la diabetes, que se encuentra en el 8,7%, según datos del Ministerio de Sanidad.
«Lo que comemos afecta significativamente a la salud y a la calidad de vida. De ahí la importancia de cambiar algunos de los actuales hábitos alimentarios para recuperar alimentos habituales de la dieta mediterránea y que han estado muy presentes en nuestras cocinas hasta hace poco tiempo», ha señalado la OCU.
Por todo ello, ha recomendado un consumo diario de verduras y hortalizas frescas, fruta fresca de temporada, frutos secos, lácteos no azucarados, pan integral en vez de pan común y aceite de oliva, sustituyendo a la mantequilla o la margarina.
La organización también ha recomendado «recuperar» el consumo de legumbres, arroz, pasta, huevos, pollo y pescado, frente a la carne roja, varias veces por semana.
Del mismo modo, ha instado a limitar el consumo las bebidas ricas en azúcares o edulcorantes, como los refrescos, los zumos o la cerveza sin alcohol, así como a tratar de encontrar tiempo para cocinar en casa, evitando «en la medida de lo posible» los platos preparados ultraprocesados ricos en sal, azúcar, grasas saturadas y aditivos.