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En el dinámico panorama laboral actual, ciertos empleos enfrentan una disminución en su demanda debido a la automatización y los avances tecnológicos. Según el Foro Económico Mundial (WEF), se proyecta que para 2030, varias ocupaciones experimentarán una reducción significativa.
Entre las profesiones con mayor riesgo de decrecimiento se encuentran los trabajadores de servicios postales, cajeros bancarios y capturistas de datos.
Asimismo, roles como cajeros en tiendas, secretarios ejecutivos, asistentes administrativos, impresores, personal de contabilidad y nómina, gestores de inventarios y asistentes legales. estarán en declive según el análisis.
Ante este escenario, es esencial que los profesionales en estas áreas consideren la actualización de sus habilidades y la adquisición de competencias en campos emergentes. La capacitación continua y la adaptación a las nuevas tecnologías son clave para mantenerse relevantes en el cambiante mercado laboral.
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